/p>Los españoles redujeron un 4,1% su gasto en los establecimientos de hostelería durante el año 2012, según revela el análisis del consumo alimentario realizado en España fuera de casa realizado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. Este ha presentado dos estudios sobre consumo extradoméstico en 2012 a fin de analizar las claves que explican los cambios y la evolución previsible de la restauración durante los próximos meses.
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Del primero de ellos, el cuantitativo, el director general de la Industria Alimentaria, Fernando Burgaz, ha destacado que el gasto de los españoles en los establecimientos de hostelería y restauración durante 2012 fue un 4,1 por ciento menos que en 2011: en total, 33.044 millones (cuando en 2009 se superaban los 37.500 millones de euros).
Su disminución viene motivada por el descenso de ventas, visitas y del ticket medio por comensal en comidas y cenas, que se situó en 4,84 euros en 2012, un 1,2% menos con respecto al año anterior. En cuanto a las visitas, se realizaron 6.831 millones, un 2,9% menos que en 2011.
El mayor gasto, 16.290 millones de euros, se realizó en los restaurantes con servicio de mesa, seguidos de los establecimientos de autoservicio, servicio rápido o en barra, que ascendió a 10.160 millones de euros y la cantidad restante, 6.592 millones de euros, se destinó a las máquinas, hoteles, transporte, ocio nocturno o conveniencia.
Estas cifras muestran la “vuelta a casa”, es decir, salimos menos y gastamos algo menos”, señaló el Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete.
Reservas por Internet, comida más sana… las nuevas tendencias
Por otro lado el desarrollo de las reservas por internet, la vuelta a la comida más natural y la diferente distribución de comidas y horarios, son algunas de las tendencias de la restauración que señala el estudio cualitativo “Qué, dónde y cuándo come el cliente de la hostelería? El nuevo paradigma y las claves en el canal horeca” presentado también durante la jornada #Anticipa2 por el Ministerio de Agricultura y Alimentación.
Aunque las reservas por Internet todavía no son generalizadas sí están ganando terreno, y cada vez es más usual el primer acceso al restaurante a través de las redes sociales y de la Red. Así mismo, las tarjetas y los teléfonos móviles se están afianzando como medios de pago.
En cuanto a los productos consumidos, se tiende a una alimentación más sana: ganan importancia las verduras y crece moderadamente la fruta en los postres de los restaurantes, así como la preocupación del establecimiento por ofrecer menús con calorías controladas.
No obstante, según se señala, el impacto que tendrá cada una de estas tendencias será diferente en cada modelo de negocio.
El estudio del Ministerio engloba a los más de 300.000 establecimientos de restauración existentes en nuestro país en cinco grandes tipos:
– Los “Trendies”, que son los restaurantes minoritarios en los que predomina la figura de un chef de prestigio, que dan mucha importancia que el producto sea fresco, sano y natural, además de multicultural.
– Los Buscadores de oportunidades, que representan un 4% y están más centrados en los clientes, dando importancia a lo que se comenta en las redes sociales y a los productos sanos y naturales.
– Los Generadores de volumen, las cadenas organizadas, donde pierde protagonismo el camarero, se facilitan los sistemas de pago con la última tecnología y se comercializan mayores volúmenes de comida. De ahí que sea muy importante la IV gama, lo que facilita una menor dependencia de la cocina.
– Los Especialistas aumentados (es el caso de las estaciones de servicio) que ofrecen una amplia disponibilidad no sujeta a horarios y se basan en el autoservicio.
– Los Esenciales de Producto, la gran mayoría de los establecimientos, que representan a los restaurantes y bares tradicionales. Persiguen facilidades de pago, valoran la formación y cualificación del personal y la transparencia en la cocina, y buscan una simplificación de la oferta.