/p>>¿Cuántas veces se busca un espacio privado y confortable para comidas, cenas o reuniones y no es precisamente fácil encontrarlo? Para cubrir este nicho de mercado, cada vez con más demanda, los propietarios de la madrileña Taberna Pedraza han creado Entrada de Mercancías.

El agradable look industrial de Entrada de Mercancías
El confortable look industrial de Entrada de Mercancías, obra de Lázaro Rosa Violán

Entrada de Mercancías es un espacio multiusos, completamente privado, que cuenta con una cocina completamente equipada, una bodega bien surtida con interesantes referencias y una amplia sala con espacio para 20 personas sentadas en mesa corrida.
Una iniciativa del matrimonio Pedraza, Santiago Pedraza y Carmen Carro, que se suma a las exitosas Taberna Pedraza y Carmen Casa de Cocidos, y está situado en el número 35 de la madrileña calle Ibiza.
Con un cuidado interiorismo firmado por el diseñador Lázaro Rosa Violán, Entrada de Mercancías es un espacio moderno y acogedor, decorado de forma sobria, con paredes de estanterías con puertas de cristalería metálica a un lado, y rompedores murales de vinilo en las paredes vacías. En el suelo, cálida madera, y en el techo focos de estética industrial. Una decoración sin estridencias que casa a la perfección el carácter polivalente del local.
Fotos del interior de Entrada de Mercancías
El local, sobrio y muy agradable, es un espacio polivalente con cocina perfectamente equipada

Disponible todos los días de la semana, previa reserva, y en horario de 9 a 2 de la madrugada, los servicios de Entrada de Mercancías (tel. 602 222 444) van desde el simple alquiler del espacio hasta la organización de comidas o cenas con cocineros de la propia empresa. En el establecimiento puede tomarse todo lo que hay en la carta de Taberna Pedraza o de Carmen Casa de Cocidos, o solicitar un menú personalizado, o bien el cliente puede traer a su propio equipo de cocina. Dispone, además, de equipamiento para reuniones y presentaciones de empresa, desayunos de trabajo o presentaciones de producto.
Un espacio polivalente en el que todo está permitido. «Cualquier cosa que el cliente desee hacer es perfectamente negociable», explican sus promotores. Un ejemplo de cómo los hosteleros se adaptan a las nuevas tendencias y cómo la flexibilidad, en espacios, formatos, oferta y horarios, es la clave de la nueva restauración.