Entre las nuevas aperturas en la capital destacamos tres establecimientos muy diferentes pero con algo en común: la apuesta por una cocina tradicional, sabrosa y reconocible, apta para todos los públicos, en formato de carta y de picoteo, en un entorno especialmente cuidado. Y ojo a la amplia franja de horario: los nuevos restaurantes no sólo no renuncian, sino que aspiran a potenciar el desayuno, fórmula en pleno auge.

Meating y La Atrevida: doblete de Óscar Velasco

La sala del restaurante Meating
La sala del restaurante Meating, ahora bajo la batuta de Óscar Velasco

Tras varios meses de trabajo con el restaurante, el reconocido chef Óscar Velasco (al frente de Santceloni, con 2 estrellas Michelin, 3 soles Repsol y Premio Nacional de Gastronomía) se ha unido como socio y asume la dirección gastronómica en la nueva etapa del restaurante Meating.
La carta, renovada, mantiene la esencia de su cocina de producto, con la cuidada selección de la materia prima para satisfacer a los incondicionales de este establecimiento madrileño, ahora ubicado en la calle Valenzuela, número 7: verduras de pequeños productores de Tudela y San Sebastián; la excepcional carne de Cárnicas Guikar; pescado servido desde Luarca por Jorge Lanza y pan artesano de La Panotheca.
Ya se puede degustar en Meating la nueva carta confeccionada por Óscar Velasco, que ha renovado algunos clásicos de la casa. También se han ha ampliado horarios de lunes a viernes para ofrecer desayunos a partir de las 10:30 horas, y el bar-coctelería está abierto abierto durante todo el día.
El confortable comedor de La Atrevida
El confortable comedor de La Atrevida

Además, Óscar Velasco estrena otro proyecto en Madrid, también de la mano del grupo de restauración La Colección de Gastronomía, al que pertenece Meating. Su nombre es La Atrevida, un nuevo restaurante en la céntrica calle Lagasca, con una carta basada en producto de calidad y ejecutada con sencillez y propuestas muy reconocibles, para gustar a todos.
Con dos espacios diferenciados, bar con oferta de tapas y restaurante, La Atrevida ofrece una cocina desenfadada e informal en una de las principales arterias comerciales de la capital.
 

La Primera, aires cántabros en la Gran Vía

Restaurante La Primera, en Madrid
El cálido interior, en gris y azul, de La Primera, obra del estudio Tarruella-Trenchs

La Primera es el nombre del nuevo resturante de Paco Quirós y Carlos Crespo, que acaba de abrir sus puertas en el emblemático edificio Grassy, en el número 1 de Gran Vía. Su nombre hace referencia a la playa más importante y representativa de Santander la primera playa del Sardinero, y ya anticipa su cocina de clara raíz cántara,
Así, Quirós repite propuesta gastronómica basada en recetas reconocibles y sabrosas, muy similares a las que ofrece en sus otros tres exitosos restaurantes de la capital, Cañadío, La Maruca y La Bien Aparecida. Todas las propuestas tienen un denominador común: ofrecen cocina tradicional bien elaborada, de guiso y cuchara, con recetas de toda la vida.
“Buscamos que el cliente repita otro día, con un familiar o con otro compromiso. Que sepa con lo que se va a encontrar, sin sorpresas ni decepciones», señala Paco Quirós. «En La Primera buscamos lo de siempre, recetas ricas y sabrosas. Lo normal».
La Primera abre desde las 8:00h, entre semana, y a partir de las 10:00h los fines de semana, y quiere convertirse también en el lugar perfecto para el desayuno, por lo que ha incorporado diferentes fórmulas de desayuno que cubren todos los gustos.
Atención, también, al exquisito interiorismo firmado por el estudio Tarruella-Trenchs.
 

Nueva taberna Arzábal en Chamberí

Taberna Arzábal Chamberí
La madera y el vino dan carácter a la nueva taberna Arzábal Chamberí

A principios de diciembre Álvaro Castellanos e Iván Morales inauguraban su nueva taberna Arzábal en el hotel NH Chamberí (Bretón de los Herreros, 29), en la famosa zona gastronómica de Ponzano. La nueva Arzábal Chamberí se une a sus castizas «hermanas» Arzábal Retiro y Arzábal Museo, en el Museo de Arte Reina Sofía en la zona de Atocha, y apuesta igualmente por los productos de temporada y la cocina tradicional de siempre.
Con una amplia y bien surtida barra reivindica además la esencia de las tabernas de toda la vida, «el cariño en cocía y sala», explican sus creadores, y luce un cuidado interiorismo que invita al disfrute gastronómico a cualquier hora del día.