/p>>Se sabe la fecha: el 4 de abril, y la hora: 21:30. También se conoce la ciudad: Madrid. El lugar es todavía un secreto… El próximo banquete de Banquete PopUp, cenas clandestinas promete, y mucho, de la mano de dos grandes chefs y un reputado bartender.

Lobo Banquete Pop Up
El próximo Banquete Pop Up reunirá, el 4 de abril, a  grandes cocineros: el mediático y premiado Juan Pozuelo y uno de nuestros chefs con mayor proyección internacional, José Luis Estevan. Los cócteles correrán a cargo de otra estrella:  Diego Cabrera. Un privilegio solo para unos pocos amantes de la gastronomía, cuyas entradas sólo pueden adquirirse de manera on-line.
El precio, 85 euros por comensal, Incluye cena y bebidas. El lugar se comunicará por e-mail 24 horas antes del evento.
Una peculiar filosofía: alta gastronomía efímera
Banquete Pop Up es un restaurante efímero, una experiencia gastronómica en entornos inéditos y sorprendentes, siempre distintos, dirigida por cocineros de prestigio. En cada evento se crea una atmósfera singular y especial que hacen de la cena algo más que una reunión irrepetible.
Banquete Pop Up es una iniciativa nómada y secreta. Nunca se hace el mismo menú, ni el mismo sitio. La dirección donde vaya a celebrarse se mantendrá siempre oculta hasta el último minuto.
La organización elabora menús únicos y cerrados para cada una de sus noches, de alta gastronomía y en manos de prestigiosos chefs invitados, con productos de temporada y atención a las técnicas y corrientes culinarias actuales más apreciadas. El tipo de cocina variará dependiendo del autor de cada menú.
Banquete Pop Up comienza en Madrid, donde tiene su base operativa, pero se celebrará también en diferentes escenarios de nuestra geografía, siempre en los lugares más insospechados, «escogidos siguiendo criterios donde el asombro, la sensibilidad, la discreción, la fascinación y ciertas dosis de espectacularidad sean la tónica», dicen sus promotores.
Las características propias de Banquete Pop Up limitan el aforo de asistentes: sólo un máximo de 35 personas pueden disfrutar de estas celebraciones clandestinas.
Detrás de esta peculiar filosofía de negocio están los experimentados chefs Alex Santamaría, propietario del restaurante Lur Maitea en Madrid, y Diego Ferrer, que en la actualidad dirige la empresa Azafrán de asesoramiento gastronómico.