Las ventas de los establecimientos de comida rápida crecieron un 6% en 2016, hasta situarse en 3.135 millones de euros. A ello ha contribuido el servicio delivery o a domicilio, con un crecimiento del 12%, que ya llega a suponer ya el 12% de las ventas totales.

Nuevamente el mercado español de comida rápida y a domicilio registró en 2016 una evolución positiva, en un contexto de crecimiento del consumo privado y apertura de establecimientos., revela el el Observatorio Sectorial DBK de Informa. Las ventas ascendieron a los 3.135 millones de euros, un 5,9% más que en el ejercicio anterior.

Hamburguesa
Las hamburgueserías dominan el sector español de la comida rápida, con unas ventas de 1.655 millones de euros en 2016

Uno de los motores de este crecimiento es el servicio delivery, que está siendo incorporado por algunas de las principales cadenas y ya ha pasado a representar en 2016 el 12% de las ventas totales. Así, las ventas a domicilio crecieron un 11,8% en el último año, hasta los 380 millones de euros. Las ventas en mostrador se cifraron en 2.755 millones de euros (+5,2%).
Las hamburgueserías siguen «comiéndose» de forma destacada la mayor parte del mercado, con unas ventas de 1.655 millones de euros, un 5% más que en 2015. Un crecimiento similar registraron las cadenas de bocadillerías, cuyas ventas se situaron en 570 millones de euros, mientras que el grupo de otros establecimientos creció un 6% (345 millones).
Las cadenas de pizzerías mostraron el comportamiento más dinámico, con una variación del 9,3% y un valor de 565 millones de euros. A ello ha contribuido la apertura de establecimientos por parte de las principales cadenas y la positiva evolución del servicio delivery.
Perspectivas favorables
El estudio de DBK prevé unas perspectivas positivas para les segmento de la comida rápida:
· La evolución del sector seguirá  favorecida en los próximos años por la positiva evolución del consumo privado, la expansión de algunas  de las principales cadenas y la aparición de nuevas enseñas. No obstante, se espera una ligera desaceleración en el ritmo  de crecimiento de las ventas.

El sector seguirá creciendo en los próximos años por la positiva evolución del consumo, la expansión de las cadenas y la aparición de nuevas enseñas. No obstante, se espera una ligera desaceleración en el ritmo de crecimiento de las ventas

· El volumen de negocio total  se situará cercano a los 3.300 millones de euros  en 2017, lo que supone un 4,9% más  que en el ejercicio anterior, esperándose un crecimiento ligeramente  inferior en 2018.
· El segmento  de pizzerías seguirá  mostrando la evolución más favorable, impulsado por el crecimiento del servicio delivery. Para este tipo de establecimientos se prevén tasas de variación del 7-8% en el próximo bienio.
· El negocio de las hamburgueserías seguirá  impulsado por los planes de crecimiento de las principales cadenas  y la posible entrada de nuevos operadores, con lo que se esperan crecimientos del 3-4% en los dos próximos años. Una variación similar registrarán las ventas de las bocadillerías, donde también se esperan nuevas aperturas.
· El segmento de otros establecimientos será el más dinámico en cuanto a la implantación de nuevas enseñas. Las ventas podrían aumentar entre un 4-6% en el próximo bienio.
· Además de en la apertura de establecimientos, los operadores del sector centrarán sus esfuerzos en la renovación y mejora de la imagen de marca y de las instalaciones, así como en el progresivo  desarrollo del servicio delivery a través de la venta online.

Además de en la apertura de establecimientos, los operadores de la comida rápida centrarán sus esfuerzos en la renovación y mejora de la imagen de marca y de las instalaciones, así como en el progresivo desarrollo del servicio delivery a través de la venta online

· Las principales cadenas seguirán prestando atención a las oportunidades de negocio en el extranjero, con especial interés en América Latina y Europa.
Un sector altamente concentrado
El número de establecimientos de comida rápida y a domicilio se situó en 4.730 al cierre de 2016, lo que supuso un incremento neto de 175 locales. Destaca el peso de los locales franquiciados (74,4%) frente a los propios (25,6%).
Las hamburgueserías y pizzerías acaparan la mayor parte de la oferta, con más de 1.300 establecimientos en cada caso, mientras que las bocadillerías ascendieron a 1.180 en 2016 y el grupo de otros establecimientos 890.
En el sector se aprecia una alta concentración en las principales enseñas: las cinco primeras cadenas se reúnen en 2016 el 72% del mercado total y el 52% de los locales.