La vivienda turística no es competencia, sino oferta complementaria al hotel. Así lo revela el II Barómetro del Alquiler Vacacional en España 2015, que señala que de los aproximadamente 7 millones de viajeros entre 18 y 65 años que han contratado vivienda turística en los dos últimos años, el 85% lo ha hecho conjuntamente con hoteles (5,9 millones).

El II Barómetro del Alquiler Vacacional en España 2015, presentado por HomeAway, revela que de los 7 millones de viajeros entre 18 y 65 años que han contratado vivienda turística en los dos últimos años, el 85% (5,9 millones) lo ha hecho conjuntamente con hoteles, y el 15% (1,1 millones) contratando solo vivienda turística.
Otro de las conclusiones del informe, que ha sido elaborado por la Universidad de Salamanca (Usal), es que la vivienda turística ha generado un impacto económico de 4.300 millones de euros en los dos últimos años, de los cuales 3.408 millones se destinaron a ocio y alimentación durante la estancia, repercutiendo directamente en los negocios del entorno. De estas cifras se deriva que el gasto medio por persona en alquiler de vivienda vacacional es de 141,31 euros.

Según el informe, elaborado por la Universidad de Salamanca, la vivienda turística ha generado un impacto económico de 4.300 millones de euros en los dos últimos años, de los cuales 3.408 millones se destinaron a ocio y alimentación durante la estancia

Así mismo, el estudio muestra que las personas que contratan tanto vivienda turística como hoteles por ocio o vacaciones son las que más viajes realizan al año (6,75 veces), número mayor frente a los que solo se han alojado en una u otra modalidad turística, hotel (4,43 veces) o vivienda turística (2,89 veces).
Familias (46%), parejas (30%) y grupos de amigos (21%) son los principales usuarios de vivienda turística, mientras que en los hoteles predominan las parejas (52%) y las familias (33%), y los grupos de amigos en menor medida (8%).
Respecto a la duración de la estancia y las personas alojadas, la estancia media en una vivienda turística es de 6,03 noches con un grupo medio compuesto de 3,98 personas, frente a las 3,61 noches y 2,83 personas de media en los hoteles.
En cuanto a la motivación de la estancia, hay total coincidencia de los tres colectivos (los que combinan ambas modalidades, los que se alojan en hotel o solo lo hacen en vivienda turística) en la razón principal: “Descansar, escapar de la rutina y del estrés”, situado en torno al nivel 4, en una escala del 1 al 5, seguido de «conocer nuevos lugares o ciudades»; y «divertirse y vivir experiencias excitantes» y «disfrutar de la gastronomía y el esoterismo».
¿Por qué se elige vivienda turística?
Los tres factores principales a la hora de elegir un alojamiento para las vacaciones son los mismos tanto para los usuarios de vivienda turística como de hoteles: precio, ubicación y entorno del alojamiento, puntuándose en torno a 4 en una escala del 1 al 5.
La utilización de webs de alojamiento turístico para informarse de la oferta de alojamientos o para contratar a través de las mismas es mayoritaria en cualquiera de las opciones: esto es lo que hacen el 63% de los usuarios que combinan hotel y vivienda turística, el 68% de los que solo contratan hotel para sus vacaciones y en menor medida, el 57%, los que solo utilizan vivienda turística. Este porcentaje puede deberse a que utilizan otros canales como la relación personal con el propietario o que utilizan el mismo tipo de alojamiento a lo largo del tiempo, revela el estudio.

Los tres factores principales a la hora de elegir un alojamiento para las vacaciones son los mismos tanto para los usuarios de vivienda turística como de hoteles: precio, ubicación y entorno del alojamiento

Satisfechos con la experiencia vacacional
La valoración de la satisfacción con la experiencia vacacional se sitúa tanto en hoteles como en vivienda turística en torno a los 4 puntos en una escala de 5. Por lo tanto, «se debe concluir que la experiencia vacacional es satisfactoria y que la expectativa que tienen ambos usuarios se cumple en el mismo grado» concluye el estudio. Y también la recomendación se encuentra por encima de los 4 puntos sobre 5 en los usuarios de los dos tipos de alojamiento.
En lo que respecta a la repetición del alojamiento, en el caso de que en el destino vacacional al que se desea ir no haya disponibles viviendas turísticas, el 43% de los usuarios de vivienda turística cambiaría de lugar para encontrar este tipo de alojamiento, posiblemente por la fidelidad que tienen al mismo, mientras que el 24% seguiría en el mismo destino y buscaría otra forma de alojamiento.
Además, revela el II Barómetro de Alojamiento Vacacional, más de un tercio de los usuarios que se alojaron tanto en vivienda turística como en hotel publica comentarios sobre el alojamiento en Internet. De los comentarios publicados sobre la estancia en vivienda turística únicamente el 2,33% fueron negativos, mientras que en el caso de los hoteles, los comentarios de los hoteles supusieron el 3,93%.
El alquiler vacacional no es más conflictivo que el hotel
Otra de las conclusiones del estudio se refiere a que las viviendas turísticas no generan un nivel de conflictividad mayor que en los hoteles: el 97,02% de usuarios de vivienda turística no ha tenido problemas con los vecinos, frente al 96,80% de los hoteles que no han tenido conflictos con otros huéspedes.

El 97,02% de usuarios de vivienda turística no ha tenido problemas con los vecinos, es más: se sienten en mayor grado como vecinos del destino, en vez de turistas

En sintonía con esta conclusión, hay que destacar que los usuarios de vivienda turística se sienten en mayor grado como vecinos del destino, en vez de turistas, que quienes se alojan en los hoteles.
«Este estudio demuestra la complementariedad de las modalidades de alojamiento: vivienda turística y hotel, y cómo el hotel es una alternativa real para una parte muy significativa de usuarios de vivienda turística», explica Juan Carlos Fernández, director general de HomeAway para el sur de Europa. «Además, el hecho de que en los dos últimos años haya generado unos ingresos de 4.300 millones de euros en las economías locales es una muestra de la importancia de nuestra industria en España y del enorme valor que aporta a nuestra economía”.