El chef y empresario hostelero Estanis Carenzo desembarca en Barcelona con tres propuestas diferentes ubicadas en un mismo espacio: Elephant Crocodile Monkey, centrado en la evolución del producto local; Tết, una taberna moderna vietnamita de mediodía, y Libertine, una casa de comidas, bebidas y baile.

El chef argentino da el salto a Barcelona con tres nuevos espacios situados en el nuevo hotel Casa Bonay: Elephant·Crocodile·Monkey , Tết  y Libertine.

Un nuevo reto y desafío para Bestiario Group, grupo de restauración que engloba establecimientos tan exitosos como Sudestada, Chifa Comedor, Picsa y Perro Bar y que inicia así su andadura en la Ciudad Condal.
La llegada a Barcelona marca además el comienzo de una nueva etapa en la trayectoria del chef argentino, que apuesta por nuevos conceptos y por una propuesta muy diferente a la que nos tiene acostumbrados en Madrid.

• Elephant·Crocodile·Monkey se presenta como la apuesta más ambiciosa del chef argentino en el hotel Casa Bonay.  Es el proyecto más personal de Estanis Carenzo en Barcelona. Un restaurante sin etiquetas, centrado en la evolución del producto local y en el que el chef argentino ofrece su propuesta gastronómica más cuidada y arriesgada. Aquí se sirve una cocina libre y comprometida con los productores locales, en la que se aplican todo tipo de técnicas, según convenga.
  El servicio es relajado y la oferta informal, con platos para compartir que se acompañan por  una extensa carta de vinos naturales y tradicionales, cerveza artesanal y sidra, entendidos como un alimento más del que disfrutar en la mesa.

 

• Tết es un pop up dentro del restaurante principal, Elephant, Crocodile and Monkey, que a medio día se convierte en una «moderna taberna vietnamita«. Su nombre hace referencia a la fecha del año nuevo en Vietnam, marcada por el día de luna nueva más próxima al comienzo de la primavera. Tradición y producto de calidad son los componentes principales de una carta de aparente sencillez, en la que Estanis Carenzo ofrece la posibilidad de degustar los platos más  típicos de la cocina vietnamita, como el phó, la sopa más conocida de Vietnam, y el nem rán, clásicos rollitos vietnamitas. También se ofrece carne a la brasa acompañada de arroz jazmín, encurtidos caseros y vegetales frescos, entre otros platos.

• Libertine, con un nombre que por sí solo invita al disfrute, es «una casa de comidas, bebidas y baile» que ofrece una extensísima propuesta de cócteles creados por el propio Estanis Carenzo. Tras su barra está Gintas Arlauskas, barman y experto coctelero que desde hace más de 5 años defiende la barra de Sudestada, la primera apuesta del chef en Madrid.
  ELa propuesta gastronómica empieza con «Ocho cosas buenas para compartir»: entre ellas olivas marinadas, patatas bravas, escabeche de calabazas o quesos. Después, «Ocho platos clásicos revisitados por Estanis Carenzo», grandes recetas clásicas de las cocinas del mundo que el chef ha ido encontrando por el camino y de las que ha creado su visión más personal.

Un creador de conceptos gastronómicos
Estanis Carenzo es, además de chef, un empresario creador de conceptos gastronómicos y un cosmopolita sin fronteras. Nacido en Buenos Aires, ha vivido y trabajado en grandes urbes como Tokio, Nueva York y París.
Tras pasar, entre otros, por Daniel (Nueva York), La Cote D´or (Bourgogne) o Llers (Buenos Aires), inicia su trayectoria en Madrid con la apertura en 2005 del restaurante Sudestada; Chifa Comedor en 2012, Chifa Camión y Picsa, en 2014 y Chifa Boteco y Perro Bar en 2015. Es socio y director gastronómico en Bestiario Group, en el que integra todos sus establecimientos.
El hotel Casa Bonay
La Casa Bonay es uno de los edificios más reconocidos de la Gran Vía de Barcelona. Data de 1869, el maestro de obras Francisco Batlle diseñó un edificio de tres pisos con fachada de estilo neoclasicista, que ha permanecido intacta hasta ahora, con una impresionante escalera principal y una magnífica colección de suelos de mosaico Nolla, así como múltiples elementos arquitectónicos vinculados a la masonería.
Hoy ha sido reformada por Studio Tack para transformarla en un hotel muy especial, de 67 habitaciones, que conserva todos los elementos originales que se ha podido como sus suelos hidráulicos, los techos y las puertas correderas.