Es, desde 2009, una de las 14 bodegas en España que cuenta con el reconocimiento de calidad de “Vino de Pago”, máxima categoría que puede obtener un viñedo. Otazu es un proyecto familiar localizado en un enclave privilegiado, que elabora vinos de alta gama con vocación internacional, y con una apuesta clara por el enoturismo y la defensa del territorio.
«Queremos hacer el mejor vino: ese es nuestro objetivo, y para eso trabajamos», explican los responsables de la bodega navarra. Una filosofía de excelencia que caracteriza no sólo a los vinos, sino a todo este proyecto familiar y de alta gama localizado en un enclave singular, a pocos kilómetros de Pamplona.
De sus viñedos propios salen vinos premium cuya producción se exporta en un 70% y que en España pueden encontrarse en las mesas de los mejores restaurantes.
Vinos como el último lanzamiento de Bodega Otazu, la nueva añada de Otazu Chardonnay 2016. Un blanco con volumen, final fresco y afrutado, fruto de una vendimia extraordinaria. Ya ha merecido una medalla en los International Wine Guide Awards, así como la medalla de Plata en la más reciente edición de los premios Cinve. Esta nueva añada, además, estrena la imagen de Ariadna, la escultura de Manolo Valdés que preside la bodega y distingue la gama Otazu.
O como el elegante Otazu Premium Cuvée 2013 (45% Cabernet Sauvignon, 35% Tempranillo y 20% Merlot), con 12 meses en barricas de roble francés. Un tinto fresco, sedoso y con volumen, con un largo final donde vuelven a aparecer los aromas de fruta roja y y notas especiadas y tostadas.
O como Señorío de Otazu 2009 (85% Cabernet Sauvignon 10% Merlot 5% Tempranillo), con17 meses en barricas nuevas de roble francés y 40 meses de envejecimiento en botella, que es el ensamblaje de las mejores uvas de los viñedos; cada parcela se vendimia a mano por separado. Un vino de gran complejidad con una nariz muy sutil dominada por fruta negra, con notas especiadas, balsámicas y minerales. En boca es amable y sumamente elegante, con recuerdos de fruta fresca y la madera perfectamente integrada.
Tres vinos que se suman a Vitral 2008, la nueva añada del vino más emblemático de Bodega Otazu, que sale al mercado por cuarta vez, después de las añadas 2004, 2005 y 2007, y tiene una producción muy limitada, sólo 888 botellas. Una joya elaborada con una selección de las mejores uvas de Cabernet Sauvignon procedentes de una de las mejores parcelas de la bodega.
Vocación internacional
Bodega Otazu, fundada hace algo más de dos décadas en el Señorío del mismo nombre, es hoy un referente internacional en los vinos de calidad y una de las más internacionales de España. Exporta a 38 países, entre los que destacan, por volumen de ventas, China, Estados Unidos, Canadá y Mexico. El año pasado abría su primera tienda y delegación en China, país con el que tiene una vinculación especial y que ha elegido a la bodega navarra como escenario de la final del reality televisivo The Real Master Chef China.
Cuando en 1989 la familia hispano-venezolana Penso adquirió los terrenos del Señorío de Otazu a la empresa Ebro Agrícola, optó por devolverle su pasado vinícola Entre 1991 y 1994 se replantaron 92 hectáreas de viñedo, y el primer vino de la nueva Otazu vio la luz en 1998.
El viñedo de Otazu estácertificado como Denominación de Origen Protegida Pago, la máxima categoría que puede obtenerse en España, lo que garantiza la selección y calidad de cada uno de sus vinos
Poco antes el arquitecto Javier Gaztelu (recientemente fallecido) diseñó bajo la antigua bodega la nueva sala de barricas, realmente espectacular; un marco único donde reposan caldos únicos, todos elaborados con las uvas procedentes de las 110 hectáreas de viñedo propio que rodean la bodega: Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot y Chardonnay.
Un viñedo certificado como Denominación de Origen Protegida Pago, la máxima categoría que puede obtenerse en España, lo que garantiza la selección y calidad de cada uno de sus vinos. Vinos marcados por un microclima excepcional, con influencias atlánticas, que destacan por sus colores vivos y por ser aromáticos y muy frescos en boca, con capacidad para un largo envejecimiento.
Arte y enoturismo
Bodega Otazu no sólo ha rescatado la tradición vitivinícola milenaria del Señorío, sino que restaurado un rico patrimonio histórico cultural medieval conformado por una pequeña iglesia románica del siglo XII; una torre palomar del siglo XIV), un palacio y una bodega del siglo XIX, hoy en día reconvertida en museo o espacio de arte donde se exponen grandes obras de arte contemporáneo internacional que forman parte de la colección privada de la familia propietaria.
Por todo ello, la bodega es visita enoturística obligada, al unir un marco natural de gran belleza, sus viñedos propios, el complejo histórico cultural que se remonta a la Edad Media, la colección de arte contemporáneo dentro y fuera de la antigua bodega, y el ambicioso proyecto vitivinícola. Un marco excepcional, además, para eventos y celebraciones singulares, para los que cuenta con instalaciones perfectamente adecuadas, restaurante incluido.