Los fogones del restaurante Zaldiaran de Vitoria ya están preparados para acoger, el próximo 6 de noviembre, la cena homenaje al crítico gastronómico Rafael García Santos. En el evento se darán cita unas 70 estrellas Michelin que reconocerán la labor de uno de los nombres imprescindibles en la revolución de la gastronomía española contemporánea. Tan querido como temido, sus críticas y reseñas sirvieron para dar a conocer a «celebrities» como Ferran Adrià, Josean Alija o Quique Dacosta.

Como no podía ser de otra manera, el menú de la velada en honor a Rafael García Santos correrá a cargo de los grandes nombres de la cocina española como Joan Roca, Martín Berasategui, Patxi Eceiza, Quique Dacosta, Víctor Arguinzóniz y Eneko Atxa.
Estos maestros ofrecerán un menú único y muy especial a los 130 cubiertos reservados desde hace ya muchos meses para la ocasión. Entre los asistentes figuran el chef italiano Massimo Bottura, el alemán Joachim Wissler, el holandés Jonnie Boer o el francés Pierre Gagnaire, así como los españoles Pedro Subijana y Carme Ruscalleda, entre muchos otros, todos con el objetivo de reconocer la labor de Rafael García Santos.

Un cubierto de 300 euros con una lista de espera de más de 100 personas

Los comensales se deleitarán con un menú que abrirá un milhojas caramelizado de anguila ahumada, foie, cebolleta y manzana verde, un clásico de Martín Berasategui y cerrará el dulce «Viaje a La Habana» de Quique Dacosta. En total once platos entre los que se servirán sofisticadas exquisiteces como ostras asadas, pichones y angulas; un cubierto que se cotiza a 300 euros y para el que hay una lista de espera de más de cien personas, añaden desde el restaurante Zaldiaran.
Uno de los promotores de este evento, Martín Berasategui, ha destacado el carácter «provocador» de García Santos, que fue también promotor del Congreso de Cocina de Autor de Vitoria, que en sus 22 ediciones marcó un antes y un después en la cocina. El chef guipuzcoano también ha destacado la aportación de García Santos para conseguir que «un país tímido y con cierta vergüenza como era España» se atreviera a liderar la vanguardia culinaria. «Puso en valor los productos y fue quien nos despertó«, ha enfatizado.
El propio García Santos reconoce que ha disfrutado de una vida «rebosante de felicidad» por haber podido dedicarse a lo que más le gusta y «hacer lo que le ha dado la gana».
Impulsor también del congreso Lo Mejor de la Gastronomía en San Sebastián, además de colaborador en diversos medios de comunicación y revistas especializadas, García Santos ha remarcado el «mérito» de un país como España «que venía de la pobreza y de un nivel cultural más bajo» que otras potencias europeas, pero «miró hacia adelante y con humildad cambió el mundo de la gastronomía y llegó a ser la primera potencia del mundo».