La cadena Servigroup ha higienizado todos sus hoteles, que ya están preparados para poder abrir en cuanto Sanidad lo autorice. Según su presidente, José María Caballé, esta crisis “deber hacernos más fuertes y tenemos que replantearnos estrategias para volver mejores al mercado”.
Servigroup, con 19 establecimientos de los que 18 están repartidos por toda la Comunidad Valenciana, Murcia y Almería, y otro en Colombia, ya está ya preparada para iniciar la desescalada del Covid-19 «en cuanto las autoridades sanitarias lo autoricen, y al ritmo que imponga la Administración». Para ello todos sus hoteles se han sometido a un proceso integral de higienización y desinfección sanitaria en todas las zonas comunes, habitaciones cocinas y baños, que han quedado “encapsuladas para abrirlas como si fueran nuevas en cuanto nos los autoricen”, subraya el presidente, José María Caballé.
“Nunca imaginé vivir una situación excepcional como ésta, que afecta a todo el sector. Nuestra maquinaria no ha parado y trabaja para seguir garantizando la calidad de los alojamientos, y por recuperar la normalidad por completo lo antes posible y cuando la situación lo permita”.
Con el cierre de hoteles, y al igual que el resto del sector hotelero, Servigroup ha tenido que afrontar una situación jamás vivida hasta ahora. “Nos hemos visto obligados, por responsabilidad y por solidaridad, a velar por la salud de nuestros clientes y la de todos nuestros trabajadores y colaboradores”, afirma José María Caballé. “Ahora hay que quedarse en casa, por la seguridad y por la de todos, pero nuestros clientes pueden estar tranquilos porque en cuanto abramos, la calidad, seguridad e higiene de nuestros hoteles estarán garantizados”.
Flexibilidad en las cancelaciones
Caballé afirma que “la vuelta será complicada y habremos pasado momentos duros, pero lo haremos con más trabajo e ilusión que nunca. Seguramente tendremos que volver de forma paulatina, pero no por ello dejaremos de estar al 100%”.
La cadena ha puesto también en marcha una política de cancelación para hacer frente a los problemas de reservas que estaba generando en sus clientes la crisis. La cadena explica que se puede reservar en sus hoteles con “total tranquilidad” gracias a la flexibilidad que “ofrecemos al guardar el depósito para otras fechas durante 365 días en caso de no poder venir en las fechas de la reserva, manteniendo ventajosos precios. Además, debido a la delicada situación actual las reservas hasta la posible apertura se pueden cancelar sin coste”, explica José María Caballé.
Cuando el grupo pueda abrir sus puertas, “la seguridad de nuestros huéspedes y trabajadores seguirá siendo primordial”, señala. Por ello afirma que “seguiremos tomando las máximas precauciones aplicando las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, y se mantendrá el incremento de medidas de limpieza en habitaciones y áreas comunes, así como las medidas de higiene”.
La cadena ha puesto en marcha una política de cancelación: se puede reservar en sus hoteles con “total tranquilidad” gracias a la flexibilidad que ofrecen al guardar el depósito para otras fechas durante 365 días en caso de no poder ir en las fechas de la reserva
José María Caballé entiende su gestión de la cadena hotelera como algo más que la parte empresarial. “Un director de hotel tiene que ser como un experto mayordomo y hacer que el cliente se sienta lo más cómodo posible. A través de los años me he dado cuenta que el cliente no quiere ser sólo receptor de un servicio y pagar por ello: quiere un calor humano, un acercamiento. Parte del éxito es ofrecer un servicio poniendo todo el empeño personal y cariño del equipo en él”.
«Hay que reinventarse»
Para el presidente del grupo benidormí, el sector hotelero tiene que sacar conclusiones de esta crisis. “No lo digo yo, lo dijo Albert Einstein: no pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo. La crisis puede traer cosas positivas, pues la creatividad nace de la angustia, esa que ahora mismo nos tiene atenazados a todos. Venzamos al virus desde la Sanidad y luego trabajemos duro para reinventarnos. La verdadera crisis económica sería la incompetencia”.