¿Qué comeremos en la etapa post-Covid? ¿Cómo está cambiando la cadena alimentaria? Llega un nuevo panorama de consumo que se va a basar en la higiene, la seguridad alimentaria, los modelos híbridos de negocio, la innovación del e-commerce, la robotización y los alimentos de proximidad, entre otros pilares.
Un nuevo panorama alimentario con un consumidor más consciente mucho más exigente. Así lo revela el informe Fooduristic Especial Covid-19 ¿Qué comeremos cuando esto pase? elaborado por Km Zero Food Innovation Hub y que recoge una serie de reflexiones sobre los cambios en los valores y hábitos que dirigirán las acciones de productores, consumidores, supermercados, restaurantes y de las redes de soporte y logística.
El estudio destaca los pilares que están marcando y van a marcar la alimentación post pandemia: la salud, la higiene, la seguridad alimentaria, los modelos híbridos de negocio, la innovación alrededor del e-commerce, el propósito empresarial o los alimentos de proximidad. Factores que deben ser cruciales para la industria alimentaria y para todas aquellas empresas y startups que quieran sobrevivir en un contexto cambiante e incierto.
«El que sepa entender y sepa adelantarse a lo que está pasando, tendrá la oportunidad de salir más reforzado»
«El que sepa entender y sepa adelantarse a lo que está pasando, tendrá la oportunidad de salir más reforzado», señala el director de KM Zero Food Innovation Hub, Raúl Martín. «Ahora es importante seguir innovando para adaptarnos a la nueva demanda de la forma más eficiente posible, teniendo en cuenta las tendencias del mercado. En este momento startups y empresas deben replantearse su modelo de negocio, reforzar el canal on-line, estudiar costes y aligerar estructuras hasta donde sea posible».
Salud, seguridad alimentaria e higiene
Las medidas de higiene y la seguridad alimentaria van a ser cada vez más estrictas y demandadas por el consumidor, tanto en el sector del gran consumo como en la restauración. La pregunta es si estas inquietudes se traducirán en la introducción de un mayor número de plásticos que protejan los alimentos, como está pasando en países muy preocupados por garantizar la seguridad alimentaria como Japón, o las empresas seguirán desarrollando un packaging cada vez más sostenible, manteniendo así una tendencia que iba al alza antes del Covid-19.
Por otro lado, el consumidor está cada vez más preocupado por su salud, y el consumo de determinados productos como probióticos, prebióticos, productos ricos en vitamina D o en fibra va en aumento, así como el de alimentos que le proporcionan bienestar global y también disfrute y diversión.
Un modelo híbrido de compra
Con el estado de alarma el canal online se ha visto impulsado de una forma sin precedentes en España. Según la consultora Nielsen, si antes del confinamiento apenas el 2% de los hogares españoles hacía alguna compra por internet durante el año, este porcentaje se ha duplicado ahora hasta el 4%. Muchos consumidores han convertido ya el e-commerce en su canal habitual de compra.
El futuro pasa por una transición hacia modelos de supermercado híbridos que combinen los canales on-line y off-line para poder satisfacer la demanda creciente
El futuro pasa por una transición hacia modelos de supermercado híbridos que combinen los canales on-line y offline para poder satisfacer la demanda creciente. En breve asistiremos a la robotización del retail y que un ejemplo será el reparto a domicilio mediante drones, para garantizar periodos de entrega breves y evitar el contacto físico. Respecto a los métodos de pago, el estudio señala que tanto en la gran distribución como en la restauración el papel moneda desaparecerá de manera progresiva a favor de nuevos métodos de pago contactless.
El futuro de la restauración: el negocio mixto
No solo el papel moneda desaparecerá en la restauración. Muchas empresas de restauración tendrán que llevar a cabo cambios y reinventarse, transitando también hacia modelos híbridos de foodservice y food delivery. Con la pandemia muchos restaurantes ya se han visto obligados a cesar su actividad en el espacio físico que ocupan y redirigirla a su vez al servicio exclusivo a domicilio para poder sobrevivir. De hecho, varias iniciativas han surgido para dar apoyo al sector. Todo apunta a que plataformas como Deliveroo, Glovo, Just Eat y Uber Eats, que venían experimentando un notable crecimiento en los últimos años, van seguir aumentando de manera significativa su actividad.
Cocinando en casa
El cierre de colegios, empresas y restaurantes ha llevado al consumidor a tener que realizar en el hogar las comidas que antes realizaba fuera. En esta línea. Un estudio de Havas Media Group España junto a Canal Sondeo, señaá que cocinar en casa es uno de los pasatiempos que más se está llevando a cabo durante el confinamiento. Muchos consumidores quieren recrear en sus casas experiencias culinarias gourmet, lo que significa que los productos de indulgencia y placer se abren hueco en la cesta de la compra.
Por contra, un porcentaje importante de la población va a ser mucho más sensible a los precios debido al desempleo y la recesión, por lo que ganarán terreno supermercados discount que ofrezcan precios más bajos.
Compromiso con el entorno
Es probable que la crisis derivada del Covid-19 favorezca un mayor compromiso del consumidor con su entorno: preferirá adquirir productos nacionales o incluso de su localidad para apoyar la recuperación económica del tejido empresarial cercano. En ese sentido crece el uso de plataformas que distribuyen productos de agricultores de Km 0 en núcleos urbanos. Esta entrega a domicilio está impulsando el consumo de productos del territorio.
El consumidor preferirá adquirir productos nacionales o incluso de su localidad para apoyar la recuperación económica del tejido empresarial cercano
Por otro lado, el cambio radical que están experimentando los modelos de consumo en la actualidad favorece la creación de sinergias entre las startups de tecnología alimentaria y las empresas de carácter tradicional, haciéndolas a ambas más resilientes y acelerando, incluso, su crecimiento. Un claro ejemplo es la inversión de Grupo Martínez en Trazable. El grupo ha apostado por esta startup que se encarga de unificar la información de trazabilidad a lo largo de las cadenas de suministro y certificar cada etapa mediante el uso de tecnología blockchain, permitiendo que las empresas puedan detectar a tiempo incidencias en cualquier etapa de la cadena.
Finalmente, el informe señala que a la hora de decantarse por un producto u otro, los consumidores van a acordarse de las marcas que han llevado a cabo buenas prácticas para hacer frente a la crisis derivada del Covid-19, así como de las compañías pertenecientes a sectores esenciales que han estado «al pie del cañón» mostrando su solidaridad con los colectivos más vulnerables.