¿Son seguras las máquinas vending? Sí, hoy más que nunca. Grupo Azkoyen presenta la tecnología Air Touch, una nueva medida de seguridad e higiene con la que el usuario puede seleccionar el producto desde una distancia de seguridad de hasta 2 centímetros. También Paynopain lanza una app que posibilita pagar con el smartphone y evitar el contacto físico. Por su parte, Aneda (la Asociación Nacional Española de Distribuidores Automáticos) ha publicado la guía de buenas prácticas del sector.
El grupo navarro ha desarrollado y patentado la tecnología Air Touch para para sus máquinas automáticas. Un sistema que permite al usuario obtener los productos sin necesidad de tener contacto con la superficie de la máquina, aportando seguridad e higiene al proceso de compra.
Los paneles de pulsación mecánicos o con pantalla táctil de las máquinas expendedoras, que son a menudo un foco de contagio de bacterias y virus, dejan paso a las nuevas tecnologías «contactless» que funcionan a distancia, como Air Touch, que incorporan las máquinas de café y vending del Grupo Azkoyen. Gracias a ella, el usuario puede seleccionar el producto que desea desde una distancia de hasta 2 centímetros de la superficie del panel de selección:
Además de los pagos contactless y otros sistemas asociados, a la hora de pagar, Azkoyen Group cuenta también con la tecnología de medios de pago electrónicos Pay4vend, con la que se permite el pago a distancia con disposivos móviles. Las medidas de seguridad e higiene que posibilitan estas tecnologías mejoran la confianza de los consumidores en la utilización de las máquinas expendedoras, ideales para entornos laborales y de hostelería.
PaynoPain lanza la app para pagar con el móvil
PaynoPain, firma especializada en herramientas de pagos on-line, ha creado la app Tap&Drop, que permite el pago a través del móvil en las máquinas vending, evitando el contacto físico.
Disponible en Android por el momento, esta solución permite al usuario comprar en las máquinas vending escaneando un código QR con su smartphone, de manera fácil, segura e intuitiva. El usuario solo tiene que vincular su móvil con la máquina mediante bluetooth, escanear el código, elegir el producto pulsando la opción correspondiente en la máquina y pagar desde la app.
Esto significa que la máquina no necesita tener conexión a Internet, sino que, a través del móvil y mediante un canal cifrado, se conecta con la nube blindando el dispositivo y la máquina de venta automática ante cualquier intento de hackeo. De esta forma, se supera el sentimiento de inseguridad de algunos usuarios al pagar con móvil.
“Con Tap&Drop, el sector del vending tiene un importante revulsivo para catalizar, de una forma sencilla, rápida y efectiva, todos los procesos de venta que no se finalizan porque el usuario no tiene efectivo”, explica Cristian Stan, responsable del proyecto en Paynopain. La previsión es que el número de máquinas con este servicio crezca exponencialmente en el corto y medio plazo.
Guía de buenas prácticas en el sector del vending
Por su parte Aneda (la Asociación Nacional Española de Distribuidores Automáticos) ha contribuido durante el estado de alarma a mantener las medidas de seguridad y las óptimas condiciones en todos los espacios donde las máquinas vending están operativas, aportando seguridad al consumidor.
Por ello, han publicado la guía de buenas prácticas y protocolo de medidas preventivas en el sector del vending, como herramienta para el buen hacer del sector y para minimizar los riesgos de contagio. La guía, en la que se detallan medidas específicas, ha sido remitida a todas las autoridades competentes para reforzar el compromiso sectorial.
Uno de los puntos es la seguridad, por lo que desde Aneda recuerdan que “la única forma de lograr la caída del virus es hacer un uso responsable y respetar el entorno de las máquinas, cumpliendo las indicaciones de los sanitarios como lavarnos bien las manos y respetar las distancias de seguridad, podremos disfrutar como siempre de ellas”.
Algunas de las acciones que se están llevando a cabo en las empresas es el extremar la limpieza y desinfección de las máquinas en cada reposición y la protección de manos y caras de los reponedores, entre otras.
La distribución automática no solamente ha sido necesaria en un momento excepcional como este, sino que, al estar prohibida la restauración colectiva en este escenario, las máquinas expendedoras han resultado imprescindibles para proporcionar alimentos y bebidas en determinados emplazamientos a sanitarios, policías, militares, servicios de protección civil y otros usuarios especialmente involucrados en esta crisis. A su vez, el servicio que prestan las máquinas vending está disponible en todo momento, 24 horas al día, 365 días del año.