El malagueño Pastrami Club, proyecto del estudio de interiorismo Paco Lago, ha resultado galardonado en los prestigiosos premios internacionales de diseño IF Design Awards 2020, en la rama de arquitectura interior y la categoría de «night club». ¿Su secreto? El viandante se topa con un pequeño puesto de comida rápida donde se sirven bocadillos de pastrami, pero al abrir la puerta del baño… todo se transforma.
El premio a la Excelencia en Diseño a Pastrami Club ha sido otorgado por un jurado de 78 expertos de más de 20 países, y en esta edición la competición ha estado especialmente reñida, al haberse presentado nada más y nada menos que 7.298 referencias de 56 países.
Pastrami Club marca un nuevo tipo de concepto de club nocturno sin precedentes en una ciudad como Málaga. Inspirado en los speakeasy clandestinos del Nueva York de los años 20, los visitantes disfrutan de una experiencia en tres entornos diferentes, que comienza con el impacto inicial de acceder al club a través del baño de caballeros del local de sándwiches. «La novedad y lo arriesgado del concepto, junto con la resolución de los diversos desafíos estéticos del proyecto, hacen de este espacio un punto de referencia en diseño para la ciudad», valora el jurado de los If Awards.
Lo que mejor define a Pastrami Club es la sorpresa. Se busca sorprender desde el exterior mediante el pequeño puesto de sándwiches de pastrami, con el acceso secreto al club a través del baño de caballeros, en el que todo está boca abajo. De ahí se accede a la sala lounge con su juego de luces único o su espectacular barra de mármol, y la sorpresa sigue al adentrarse más allá del telón rojo y disfrutar de la exclusiva sala rosa, con la pista de baile, o al entrar por el acceso VIP y pensar que se ha bajado al infierno. Cada zona se diferencia con una iluminación y techos distintos, y en total son 400 m2 de superficie
El estudio creativo Paco Lago Interiorismo aceptó el reto de un proyecto nada convencional, ya que diseñar pensando en un concepto de club clandestino implicaba una serie de desafíos como, por ejemplo, el que supuso la iluminación de todo el local. Para la sala lounge se diseñó un techo artesonado hecho a medida, del que se suspenden unas luminarias vintage, que pueden moverse rítmicamente o mantenerse fijas:fue lo más dificil del proyecto. La sala rosa, por su parte, luce un techo de casetones cuadrados que se curva hasta fundirse con la trasera de la barra, en el que cada casetón es una lámpara que cambia de color e intensidad.
En cuanto a los revestimientos verticales, se optó por materiales económicos, versátiles y resistentes a los que se ha sacado todo su potencial estético: espejos, revestimientos vinílicos, celosías, cortinas metálicas, piedra o tela. «Desde nuestro estudio asumimos desde el primer momento que teníamos que salirnos de lo convencional», explican sus responsables. El resultado es un espacio mágico repleto de luces de neón, espejos, acero, mármol y mobiliario de estilo art decó.
Pastrami Club es uno de los últimos proyectos realizados por el estudio malagueño, que propone soluciones creativas pensadas por y para cada modelo de negocio, creando espacios confortables y haciendo que un negocio sea actual, distinto y al mismo tiempo funcional. Y en este caso, 100% «instagrameable».
