La segunda edición de la feria Barcelona Wine Week, que se celebra del 7 al 9 de febrero, congregará la mayor oferta vitivinícola del país y contará con la participación de más de 400 empresas y firmas distribuidoras. Las variedades autóctonas serán las protagonistas de esta edición.
Del 7 al 9 de febrero de 2022 en el palacio 8 del recinto de Montjuic de Fira de Barcelona acogerá la segunda edición de Barcelona Wine Week, salón de referencia del vino español.
El certamen reunirá a más de 600 bodegas, la práctica totalidad de las Denominaciones de Origen y las principales marcas del mercado, mostrando la reactivación del sector vinícola.
Esta edición de Barcelona Wine Week (BWW) pretende dar visibilidad a las cerca de 150 variedades autóctonas de uva: variedades históricas, vinificaciones olvidadas y ahora minoritarias, de gran interés por su resistencia y contribución a la preservación del medio ambiente, a las que se están dedicando tanto pequeñas productoras como bodegas de gran tamaño.
Así, BWW presentará una retrospectiva de la evolución del vino en España en los últimos 40 años que constatará que esta tendencia “va creciendo de forma transversal, y que su recuperación y uso frente a las variedades foráneas se realiza tanto por parte de bodegas pequeñas como grandes”, explica Marta Macías, responsable del certamen.
En las diversas sesiones intervendrán entre, otros expertos, el Master of Wine Frank Smulders; el sumiller Ferran Centelles, el catedrático de viticultura Fernando Martinez de Toda, y los críticos José Peñín y Andrés Proensa.
La mayor oferta vitivinícola del país
El salón potenciará de nuevo su particular modelo expositivo que propone un recorrido experiencial por el territorio vitivinícola nacional, favoreciendo la presencia igualitaria entre las bodegas y las marcas participantes. Como en su primera edición, la zona comercial se estructurará en dos grandes áreas:
- BWW Lands, que reunirá a las bodegas organizadas por Denominaciones de Origen y otros sellos de calidad.
- BWW Brands, donde se encontrarán también las marcas más emblemáticas y reconocidas junto a empresas que ofrecen equipos, accesorios y servicios al sector.
En paralelo, el salón desarrollará un amplio programa de actividades que potenciará las experiencias formativas y sensoriales ligadas al vino.
Un pasaporte internacional para las empresas expositoras
Junto a la proyección internacional de la producción autóctona, BWW pondrá el foco en aumentar las oportunidades de negocio de las empresas expositoras, propiciándoles encuentros y ocasiones de contacto con compradores internacionales, distribuidores, importadores, mayoristas o detallistas con el objetivo de incrementar sus exportaciones o facilitarles el acceso a nuevos mercados.
La presencia de los principales operadores nacionales e internacionales, del sector estará garantizado gracias a el programa «BWW Hosted Buyers» invitará a más de 350 profesionales internacionales de alto nivel, procedentes de más de 40 países,
A ellos se sumarán otros 1.200 profesionales de origen nacional, con poder de decisión de compra en la distribución, la hostelería y el comercio acreditado.convocados gracias al programa «VIP Buyers».
La importancia del enoturismo
Todo apunta a que 2021 será un buen año para los vinos españoles, según datos del Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMV). A ello contribuirá la suspensión temporal de los aranceles de Estados Unidos, que está animando las exportaciones; la reapertura de la hostelería, y el aumento del consumo en el mercado interno.
Antes de la pandemia, casi 3 millones de personas al año visitaban las bodegas y museos de las Rutas del Vino de España, con un gasto cercano a 80 millones de euros al año. Por ello, el enoturismo destaca como sector de futuro, y las nuevas tendencias enoturísticas derivadas de la era Covid y las herramientas digitales para su comunicación y comercialización ocuparán también un lugar destacado entre las actividades de BWW.
Para Javier Pages, presidente de BWW y de la D.O. Cava, el enoturismo tiene un enorme recorrido, “no solo porque nos permite acercar el producto al consumidor de primera mano, sino porque pone en valor y transmite los atributos inherentes al vino a nivel cultural, social, de sostenibilidad y de experiencia. Si España es una potencia mundial tanto en turismo como en vino, cabe pensar que también lo será en materia de enoturismo”.
Con el apoyo de la Federación Española del Vino (FEV), también se abordarán en la feria las necesidades digitales que vive el sector, se identificarán tendencias y se buscarán sinergias que aceleren la transformación digital de la industria vitivinícola, desde la producción a la comercialización.
Toda la información sobre la «Barcelona Week Wine» está al completo pinchando aquí.
