Ubicado en la céntrica calle de Serrano, el restaurante Nómada, la última aventura gastronómica del empresario hostelero Kike Sierra, se presenta como la primera jaima de la capital donde poder degustar cocina de raíces árabes y disfrutar de un ambiente muy especial, con música y actuaciones en directo.
Nomada es un restaurante único en la capital. Definido por la propiedad como «un paraíso terrenal para cenar, beber y sanar», se ha concebido como una auténtica jaima rodeada de vegetación, cascadas de agua y una terraza con barra, sishas y cómodos sofás.
En Nómada, que sólo ofrece servicio de cenas, el comensal puede disfrutar de cocina de raíces árabes, música y actuaciones en directo, además de una carta de coctelería y la hospitalidad propia del nómada.
El comensal es recibido con un ritual de lavado de manos con agua aromatizada antes de pasar a un cálido interior con luces y sombras, tonos terracota, lámparas árabes y tejidos exquisitos, obra del estudio Parolio. En total, el espacio suma 800 metros cuadrados, con 120 plazas en el interior y 80 en terraza.
En su oferta culinaria se refleja la mezcla cultural de raíces árabes (sobre todo del Líbano), mediterráneas y andalusís. La carta ofrece las recetas «limpias y ligeras» elaboradas por su jefe de cocina de origen sirio, como el baba ganoush (berenjena asada con pimiento, limón y granada); dolma -(hojas de parra rellenas de arroz con verduras), muhamara (crema de pimiento asado con pan rallado, cebolla, nueces y tahini) o un surtido de hummus de seis sabores exquisitamente presentados.
Entre los platos calientes destacan el falafel, kebbeh (croquetas de masa de trigo y rellenas de carne de cordero y piñones) o batata kazbara, berenjenas cocidas a fuego lento con cebolla, pimiento, huevo, tomate y garbanzos.
La oferta se completa con pizzas muy distintas a lo habitual (de carne de cordero y salsa de granada, de pollo aliñado con pimiento verde y maíz…), carnes como shish (pinchitos de cordero o ternera halal especiados al carbón), phaki (pollo relleno de espinacas con huevo cocido y especias) o las castaletas (chuletitas de cordero marinadas a la parrilla). A ellos se suman pescados del día al horno y a la brasa y golosos postres.
Mención especial merece también la carta de cócteles elaborados con una curiosa y exótica selección de ingredientes y especias, y que destacan por una puesta en escena muy elegante y delicada
Nómada, situado en el número 41 de la calle Serrano, uno de los pocos ejemplos de arquitectura brutalista que quedan en Madrid, opera también en formato ‘late night‘, que brinda la opción de reservar una mesa a partir de las once de la noche, hora a la comienza una performance de música y bailarinas, y organiza todos los días una happy hour de 18:00 a 20:00 horas, con invitación al segundo cóctel.
El ambicioso proyecto de Galerías Serrano
Nómada se conecta con el bar Ishtar, un espacio exclusivo abierto solo de miércoles a domingo donde disfrutar de sesiones de djs. Ambos se suman a Bar Carallo, una moderna taberna gallega situada también en el número 41 de la misma calle Serrano. Los tres establecimientos forman parte del plan global denominado Galerías Serrano, un ambicioso proyecto de revitalización del edificio com el que el el empresario hostelero Kike Sierra quiere «devolver a Madrid conceptos de los que sentirse nuevamente orgullosa».
Ishtar, un concepto independiente de Nómada, aunque conectado, ocupa la planta de abajo y se accede al mismo cruzando una cascada. Es también el primer bar Dom Pérignon de España, ambientado con sesiones de djs de prestigio internacional.
Además, Sierra está a punto de abrir Astro, un local inédito en España en el que convergen estética futurista y cocina japonesa. El empresario es socio, entre otros locales, de Panthera (con sedes de la calle Miguel Ángel y en el Hipódromo de la Zarzuela) y de las discotecas Liberty Supperclub o Thundercat.