Esta ola del Covid-19 pasa factura al sector del foodservice español, que todavía no ha recuperado los niveles pre-pandemia, y corrige a la baja las previsiones para 2022: el escenario más optimista apunta ahora a un crecimiento plano respecto a 2019.
Son conclusiones de un nuevo estudio de The NPD Group, según el cual el sector foodservice (que incluye la restauración comercial y otros canales de menor dimensión como el vending, las tiendas de conveniencia o las cantinas de empresa), recaudó 28.988 millones de euros en 2021, lo que supone un aumento del 33% respecto a 2020. Sin embargo, a pesar de este resultado favorable, aún está casi un 23% por debajo de los niveles de 2019.
El levantamiento progresivo de las restricciones, junto al avance de la vacunación, permitió que, a partir del mes de marzo, el sector comenzara a reducir gradualmente la pérdida de ventas causada por la crisis sanitaria, hasta que en octubre logró recuperar prácticamente el 90% del negocio prepandemia. Sin embargo, la llegada de la variante ómicron, acompañada de nuevas limitaciones, frenó la mejora del mercado en las últimas semanas del año.
“Ómicron llega en un momento con un consumidor muy optimista en España, pero aún muy preocupado por las medidas de protección, más que el resto de vecinos europeos», explica Edurne Uranga, directora de Foodservice de NPD en España. «Por lo tanto, se reduce la tendencia positiva que presentaba el sector, si bien el impacto es menor al de otros países europeos, donde la confianza del consumidor ha caído más que en nuestro país, y creemos que va a ser algo temporal y el mercado volverá a recuperarse”. Además, añade que «en este contexto, las previsiones para 2022 han sido revisadas a la baja por el efecto de la sexta ola a comienzos de año y apuntan a una evolución de las ventas del +0,2% respecto a 2019 en el escenario más optimista, del -6% en el caso de una recuperación gradual y del -17,7% si es más lenta”.
Hoy cerca del 35% del gasto realizado por los españoles en foodservice se destina a delivery, take-away y drive thru, lo que supone un 13% más más que en 2019
Según Uranga, la larga duración de la pandemia y el consiguiente cambio de rutinas y hábitos de la población ha modificado fuertemente el mapa de ocasiones de consumo en foodservice, en el que cobran importancia las «home meals» o comidas en casa (a través de los servicios de delivery, takeaway y drive thru) y las ocasiones vinculadas al ocio (desayunos de fin de semana, aperitivos, etc.), mientras que otras opciones, como el consumo nocturno, se ven seriamente afectadas por la crisis.
En particular, las opciones de consumo fuera del establecimiento siguen creciendo y hoy cerca del 35% del gasto realizado por los españoles en foodservice se destina a delivery, take-away y drive thru, lo que supone un 13% más más que en 2019. El envío de comida y bebida a domicilio ha aumentado su peso hasta el 8,6% del mercado, mientras, por otro lado, el servicio de recogida en el local ha elevado su cuota hasta el 26%.
El auge del consumo en familia y del segmento adolescente y joven
Por otra parte, el consumo en familia gana relevancia y logra tener más peso que antes de la pandemia, al concentrar casi el 28% del gasto en foodservice. Según explica la directora de Foodservice de NPD, «los adultos de 25 a 54 años migran ocasiones de tipo individual o que realizan solo con adultos a momentos de consumo con sus más allegados, un comportamiento que ya vimos en la crisis económica de 2008».
En relación a los adolescentes y jóvenes de entre 13 y 24 años, presentan un ritmo de recuperación del gasto muy rápido, modificando su patrón de comportamiento, cambiando ocasiones que hacían en fast food o en delivery, por las máquinas de vending o la oferta de comida preparada del supermercado.
En lo que respecta a los consumidores del segmento senior (mayores de 55 años) continúan con niveles de gasto muy inferiores a los que tenían en prepandemia, a pesar de, junto con el grupo de consumidores entre 35 y 54 años, generan cerca del 40% de las ventas totales del sector.
Recuperación de la restauración comercial
En cuanto a la evolución de los diferentes canales, Uranga subraya que la restauración comercial (establecimientos de servicio completo o FSR y locales de servicio rápido o QSR) volvió a recuperar su peso sobre el total foodservice al cierre de 2021 (83,3%). “Del resto de canales no debemos perder de vista al retail, que incluye el lineal de comida caliente del supermercado, que ha ganado más de un punto de cuota en dos años y que muchas veces canibaliza ocasiones de consumo de otras zonas del mercado”. Entender este nuevo mapa de ocasiones de consumo es clave para asegurar el éxito de operadores y fabricantes en la recuperación del sector.