Además de admirar su original interiorismo, en el nuevo restaurante del Grupo Carbón en Madrid el comensal se puede disfrutar de su cocina mediterránea, cuidada coctelería y una vibrante propuesta artística con música y danza: el espectáculo está garantizado.
Lo primero que llama la atención al entrar en Fanático, el nuevo restaurante del Grupo Carbón en Madrid, es el elefante de grandes dimensiones que, haciendo equilibrio sobre una esfera, preside todo el espacio.
Materiales cálidos y una iluminación estudiada dan un especial protagonismo a los espacios de gran altura de Fanático, situado en el número 43 de Paseo de La Castellana. Su interiorismo es obra de Daniela Bickenbach y Paula López Fadrique, y se completa con una selección de moquetas de los años 70 y pieles de terciopelo, remarcando los amplios ventanales del local.
Un gran espejo convexo que refleja la sala, junto con la luz natural del comedor crean un ambiente «alocadamente sofisticado, pero con la sensación de hacer sentirte como en casa», explican las interioristas. El objetivo es transportar al comensal a un salón acogedor y lleno de vida.
«Lo que se hemos buscado es recrear es la casa de un fanático«, señalan. «La casa de un loco de la música, de los viajes, de los animales, del arte… un fanático de la vida». Así, piezas como la gran estantería de roble repleta de elementos decorativos antiguos inspira y recoge las grandes pasiones del dueño de la casa.
Cocina mediterránea y española
Además de su impactante interiorismo, Fanático ofrece una cocina mediterránea y especialmente española, con algunos toques exóticos.
Varios de los platos se terminan delante del cliente para que la experiencia gastronómica sea redonda y diferente. Es el caso del escalope de solomillo empanado de corte grueso, crujiente por fuera y jugoso por dentro, acompañado de un huevo a baja temperatura y salsa Perigord con champiñón y trufa negra; del pollo picantón asado al carbón; de las gambas rojas de Palamós, cocinadas en la propia mesa al vapor de agua de mar con rocas calientes, o la ensalada César, preparada desde cero para que el comensal puede presenciar la elaboración de una receta que nació en el Hotel Caesar’s de Tijuana «y que se remonta a los años 20, durante la época de la Ley Seca», destaca Mariano Barrero, chef ejecutivo de Grupo Larrumba y Grupo Carbón.
El broche final lo pone una carta de postres con tentadoras propuestas como la torrija de croissant con helado de vainilla o un corte helado de nata en pan brioche. Y es que «una comida sin postre es como un traje sin corbata», afirma Barrero.
Mención especial merecen también la oferta de coctelería, con técnicas que alcanzan texturas impactantes con puestas en escena divertidas y elegantes. Su creador es el coctelero Carlos Moreno.
Y no todo queda ahí. Fanático se transforma al llegar la noche, convirtiéndose en un espectáculo de luces, música y sorpresas con una propuesta artística, atrevida, elegante y sorprendente. Un equipo de bailarines, cantantes, y DJ’s ofrecen espectáculos en los que la danza y la música marcan el ritmo lunes, martes, miércoles y viernes; con apariciones de los espectáculos de Vendetta y Masaka los jueves y domingos, haciendo de este establecimiento un destino de ocio en s mismo.
