Las perspectivas de ocupación hotelera en invierno en España superan cifras preCovid y muestran la progresiva recuperación del sector, revela el informe Smart Observatory presentado por PwC y Cehat, que advierten de la amenaza de una posible recesión a medio plazo.
El estudio Smart Observatory señala que las perspectivas de ocupación hotelera en invierno de 2023 superan las cifras registradas en 2019, sin descartar una posible recesión el próximo año.
Según el mismo, entre los meses de diciembre 2022 y febrero 2023 la industria espera alcanzar unos niveles de ocupación algo superiores a los registrados prepandemia. Sin embargo, la sombra de una posible recesión y sus efectos preocupan al sector en el medio plazo.
El estudio marca así un incremento de 0,06 puntos en las perspectivas de ocupación previstas para el invierno 2022/23 con respecto a los datos registrados en 2019 por el índice Smart Observatory. Esto refleja a su vez una recuperación de 0,87 puntos con respecto al invierno 2022/2021, que por estas fechas aún no se veía amenazado por la variante Ómicrom.
Factores para el optimismo
Entre los factores para la progresiva recuperación del sector destacan las ventas en cartera, la intención de viaje contenida, el sentimiento positivo del viajero, el interés por viajar a España y la reactivación del turismo internacional.
Sobre las ventas en cartera, el informe revela que las previsiones para el periodo diciembre-febrero superan en cinco puntos al mismo periodo del año pasado, y que las realizadas de forma directa casi duplican a las de la temporada de invierno de 2019. Este incremento de las reservas es generalizado en todas las comunidades autónomas.
Además, el sentimiento neto positivo del viajero hacia España (+1,4 puntos) se ha recuperado en el cuarto trimestre, después de que se resintiera desde principios de año como consecuencia del conflicto en Ucrania.
La recuperación del turismo internacional, basado en una intención de viaje contenida durante estos años, también es patente. A pesar de que los meses de diciembre a febrero son considerados como temporada baja en buena parte del mercado turístico del país, el interés por viajar a España se mantiene un 40% por encima de los niveles previos a la pandemia, con la mayor tasa de crecimiento en el mercado emisor de los países nórdicos y a la espera, todavía, de los mercados de largo recorrido.
Todo ello se traduce en una mejora del sector aéreo, que ya registra 10,9 millones de pasajeros entre septiembre y octubre, unas cifras cercanas a 2019.
Los indicadores muestran cómo el sector hotelero va, poco a poco, fortaleciendo sus pilares fundamentales y recuperándose de las consecuencias de la pandemia tanto en los ingresos por habitación (RevPar) como en la tarifa media diaria (ADR) que, desde junio de este año, ya se sitúan por encima de los niveles de 2019
El estudio incluye además una serie de indicadores retrospectivos que muestran cómo el sector hotelero va, poco a poco, fortaleciendo sus pilares fundamentales y recuperándose de las consecuencias de la pandemia tanto en los ingresos por habitación (RevPar) como en la tarifa media diaria (ADR) que, desde junio de este año, ya se sitúan por encima de los niveles de 2019.
La coyuntura económica, en contra
Los factores macroeconómicos, sin embargo, podrían ensombrecer las favorables expectativas de la industria hotelera para los próximos meses.
- Los principales países emisores, como Reino Unido, Francia, Alemania e Italia, han recortado notablemente sus previsiones de crecimiento, que podrían tener un efecto negativo en el flujo de viajeros procedentes de estos destinos en el futuro.
- Además, el actual contexto inflacionista afecta directamente al sector, que está sufriendo un incremento sustancial de los costes, especialmente de los relacionados con la energía y la alimentación. De momento, los hoteles han sido capaces de ajustar los precios de las habitaciones sin erosionar la demanda, pero no se sabe cuánto tiempo se podrá mantener esta situación si la inflación permanece por encima del 4% en los próximos años.
De momento, los hoteles han sido capaces de ajustar los precios de las habitaciones sin erosionar la demanda, pero no se sabe cuánto tiempo se podrá mantener esta situación si la inflación permanece por encima del 4% en los próximos años
- En este contexto de precios como consecuencia de las subidas de los tipos de interés, el encarecimiento de las hipotecas se presenta como otro de los aspectos que está reduciendo la capacidad de compra de las familias y que también podría tener sus efectos en la evolución de la industria hotelera.
La devaluación del euro frente al dólar se muestra, por el contrario, como el único ingrediente macroeconómico que está jugando a favor del sector y que está fortaleciendo a Europa como destino turístico frente al resto del mundo.
«Pese a las ganas de viajar a España, hemos de tener presente que el escenario macroeconómico es muy complicado y que nos enfrentamos a una subida de costes que está afectando dramáticamente a sectores como el alojativo, muy dependiente tanto de la energía como de la oscilación de precios en alimentación y bebidas», señal Jorge Marichal, presidente de la patronal hotelera Cehat. «Por tanto, aunque presentamos resultados optimistas, estamos vigilantes ante la complicada situación que se vislumbra».
Para José Manuel Fernández Terán, socio responsable de Turismo, Transporte y Logística de PwC España, «la intención de viajes de los principales países emisores nos permite afirmar una positiva mejora en el corto plazo. No obstante, dichos mercados se enfrentan a una situación económica de gran incertidumbre, lo cual puede afectar a la evolución del sector en las temporadas 2023 y 2024”.
Por su parte Ramón Estalella, secretario general de Cehat, señala que “es muy positivo comprobar que las menciones a España en Internet siguen siendo mayoritariamente positivas. Observamos que la seguridad y la naturaleza son lo más valorado de esas búsquedas, junto con la cultura, la gastronomía y el ocio. El turismo de sol y playa de Canarias para el invierno también es muy destacado”.