La firma especializada en bebidas de baja graduación inicia una nueva etapa tras superar el concurso de acreedores y presenta su plan estratégico 2026, basado en la innovación, la exportación y el foodservice. Además de apostar por el tinto de verano, Spritz, y Rebujito, lanzará una nueva categoría de producto en 2024.
Sandevid (Prodevisa) irrumpía en el mercado en 1986 con una categoría nueva, la de tinto de verano listo para beber. Desde entonces, la empresa fundada por dos familias de Daimiel protagonizaba innovaciones como el primer tinto de verano de grifo para horeca o como las versiones con limón, o 0% azúcar y 0% alcohol.
La firma perdía el liderazgo en 2011 tras cambios en la dirección de la empresa. La mala situación comenzó a revertir en 2017, con la vuelta de uno de los fundadores, Ángel Exojo, como CEO, quien declaró de inmediato el concurso voluntario de acreedores a fin de reflotar la empresa.
El pasado mes de julio Sandevid salía definitivamente de la situación concursal tras asumir la familia Exojo López-Tello la totalidad del accionariado, nombrar un nuevo equipo directivo con la incorporación de la segunda generación y habiendo pagado el 100% a sus acreedores.
Hoy Sandevid vuelve a crecer con cifras superiores al 10% y tiene una previsión de facturación para este año próxima a los 10 millones de euros.
La firma anuncia además la puesta en marcha de un plan estratégico para 2026 con objetivo que duplicar su facturación en 3 años con la exportación, el canal foodservice y la innovación como principales palancas de crecimiento.
El éxito de las bebidas de baja graduación
El contexto es favorable. Las bebidas de sabor de baja graduación son una tendencia al alza, impulsadas por la preocupación por la salud y el bienestar a través de la moderación en el consumo de alcohol.
Sólo el tinto de verano es un mercado que mueve 90 millones de euros, con 200.000 puntos de venta en hostelería y un 100% de distribución en alimentación. Su versión con alcohol crece de forma moderada, 1%, frente el 8% que hace su versión sin alcohol, según Nielsen.
“Este segmento tiene mucho que enseñarnos en la evolución de las bebidas de baja graduación, donde vemos cómo el binomio sin alcohol y sin azúcar es el nicho que más crece y representa ya un 30%”, explica Ángel Exojo, CEO de Sandevid.
Además, pese a ser una bebida tradicionalmente estacional, el consumo de tinto de verano está cada vez más presente durante todo el año, como alternativa con un sabor fresco, ligero y afrutado.
Innovación
La apuesta por la innovación es otra de las claves de la nueva etapa de Sandevid.
Además del valor diferencial que supone que su tinto de verano sea el único elaborado en bodegas propias, con multitud de sabores y variantes, y que sus productos sean 100% veganos (utilizando clarificantes vegetales en la elaboración de todos sus productos), Sandevid también ha desarrollado con éxito otras bebidas de baja graduación de sabores, como Sandevid Spritz, el aperitivo naranja de menos de 9% de alcohol cuya versión lista para beber supone la última innovación de la marca, o Sandevid Rebujito, con auténtico vino D.O. Manzanilla de Sanlúcar Sanlúcar de Barrameda con refresco de lima-limón.
“A punto de cumplir 40 años, la marca Sandevid está en plena forma y en breve podremos anunciar el lanzamiento de una nueva categoría de producto que se incorporará a nuestro ya amplio portfolio de innovaciones”, explica Jose Exojo, adjunto a la dirección de Sandevid.
Apuesta por la hostelería
Además, el plan estratégico de Sandevid tiene la vista puesta en el canal foodservice, donde estima alcanzar una penetración del 7% de la hostelería en las áreas foco de la marca, y aumentar su peso dentro de la facturación de la empresa hasta el 20%.
“Se trata de una nueva etapa, un nuevo rumbo para Sandevid, una marca pionera que aspira a recuperar su papel protagonista”, explica Ángel Exojo
Mercados internacionales
La zona centro y sur del país, y en especial la Comunidad Valenciana, son los principales mercados de Sandevid, “en los que percibimos cada vez un consumo más transversal”, explican sus responsables.
La empresa está situada en el entorno privilegiado de Las Tabla de Daimiel (Ciudad Real), “de donde proceden el 100% de las materias primas necesarias para elaborar nuestros tintos de verano, a través de la colaboración con 300 agricultores locales”.
La presencia en mercados latinoamericanos como México o Chile, también es clave para contribuir a la desestacionalización y mantener una comercialización estable de tinto de verano durante todo el año.
De hecho, la exportación a Portugal, Latinoamérica y la inminente llegada a Estados Unidos y otros países europeos, supondrán un 50% de la facturación de la compañía una vez implementado el plan estratégico en 2026.