A pesar de la inflación, se han recuperado los niveles de consumo fuera del hogar previos a la pandemia. Los consumidores reducen sus gastos en comida a domicilio, pero ojo: compran comida recién preparada con más frecuencia, revela un estudio de Kantar.
Comer fuera de casa a vuelto a los niveles previos a la pandemia en todo el mundo, a pesar del aumento en los precios. Así lo revela un informe glonal de Kantar Worldpanel, según el cual los consumidores eligen cenar en restaurantes aproximadamente la mitad del tiempo en el que no cocinan en sus hogares.
Aunque Europa lidera el cambio de hábitos, se extiende a todos los continentes, impulsado por la comodidad, los estilos de vida y la subida de los costes.
Contra todo pronóstico, mientras el sector de la alimentación crece un 10% por la subida de precios, el foodservice ha demostrado mucha más agilidad al ofrecer comodidad y precios asequibles.
Menús más sencillos, opciones más económicas en los restaurantes de comida rápida y alternativas de comidas de consumo rápido on-the-go han sido las grandes bazas de la restauración en medio de las presiones inflacionistas. De ahí que el foodservice ha tenido un crecimiento del 13% en comparación con el año pasado, y del 6% en términos de crecimiento orgánico.
El auge de los platos preparados
pesar de que el 60% de los consumidores considera que los gastos de envío a domicilio son demasiado altos, el 24% opta por recoger comida para llevar en lugar de cocinar, buscando ahorrar dinero y evitar la preparación de sus propias comidas.
La frecuencia de compra de alimentos recién preparados ha aumentado en todo el mundo. En Reino Unido, casi se ha duplicado desde 2021, una tendencia que se repite en China continental, un mercado que se destaca por el desarrollo tecnológico de aplicaciones de entrega.
Las previsiones de Worldpanel para 2030 señalan que los restaurantes de comida rápida representarán el 32% del gasto total en el Reino Unido, Francia y España, un incremento del 50% en 2023 y casi el doble en comparación con los niveles previos a la pandemia.
La comodidad, los precios asequibles y la variedad de opciones son aspectos clave para que los consumidores elijan platos preparados.
El informe de Kantar, basado en encuestas a 15.000 personas en 11 países, también resalta otras claves a tener en cuenta:
- Los restaurantes de comida rápida han experimentado un crecimiento en valor del 30% en 2023 en comparación con 2019. Su estrategia de evitar fuertes aumentos de precios y apostar por la innovación ha dado resultados: el 80% de los consumidores compra en estos establecimientos.
- La comida para llevar parece ser una estrategia de supervivencia que permite a los consumidores afrontar los costes al alza, siendo un 26% más económica que la entrega a domicilio.
- Los consumidores más jóvenes eligen salir a comer a diario, rompiendo la tendencia tradicional que asociaba este hábito a las actividades nocturnas.
- La entrega de comida a domicilio responde a diferentes motivaciones según las generaciones: la Generación X elige esta opción para las cenas de fin de semana, la Generación Z realiza pedidos durante la semana ,y los Baby Boomers lo hacen para el almuerzo.
- Las hamburguesas poco a poco están desbancando a las pizzas como el plato favorito de los consumidores en todo el mundo, a excepción de México.
«En medio de los desafíos impuestos por la inflación y la pandemia, la industria foodservice ha demostrado que el futuro de la restauración no está escrito en piedra», señala Javier Sánchez, Global Business Development Director, Out-of-Home & Usage, de la división Worldpanel de Kantar.
«El valor de la innovación como motor de crecimiento es incontestable. Desde restaurantes de comida rápida que reinventan sus menús hasta plataformas de delivery que transforman los hábitos culinarios, los cambios son tan diversos como profundos».