A pesar de las buenas previsiones, el balance de la Semana Santa de este 2024 para la hostelería española ha sido peor de lo esperado debido a las inclemencias meteorológicas, sobre todo las fuertes lluvias, que han provocado cancelaciones y que no haya habido reservas de última hora.
El mal tiempo generalizado durante la Semana Santa se ha traducido, por tanto, en una menor afluencia de clientes y e un consecuente descenso de facturación.
Se ha roto así la tendencia de evolución positiva del primer trimestre que siguió marcando cifras récord por la recuperación del turismo internacional y de la confianza de la demanda nacional, y que hacían prever una Semana Santa con una facturación hasta un 10% por encima del año anterior, señala desde la patronal Hostelería de España.
El comportamiento, no obstante, ha sido desigual según el tipo de establecimiento y las regiones. Las terrazas y locales más pequeños, así como las zonas de costa donde tiene un mayor peso la climatología, han sido los grandes perjudicados, y han visto reducida la afluencia y consecuentemente las ventas,
Por su parte, los establecimientos de mayor tamaño y zonas de interior, más ligadas al turismo urbano, cultural y religioso, han tenido mejores resultados, con una mayor afluencia y mejores cifras de ocupación.
«En general la actividad ha funcionado mejor en los mediodías y tardes, con un peor comportamiento de las noches, tanto en lo relativo a cenas como a ocio nocturno, que han notado una menor afluencia de clientes», indican desde la patronal hostelera.
Por otro lado, los meses de marzo y abril, en los que está encuadrada la Semana Santa marcan el inicio del mayor número de contrataciones, que ya se mantienen durante toda la temporada estival, lo que ha impactado en esta ocasión en los negocios, ya que las previsiones de personal no se han correspondido con la facturación esperada.
Las perspectivas para el verano, en cualquier caso, siguen siendo optimistas. «A pesar de este paréntesis en la buena evolución de la actividad, marcado por la inestabilidad del clima, en los meses que vienen se espera que se recupere la buena evolución que se venía manteniendo en el inicio del año», explica José Luis Yzuel, presidente de Hostelería de España.
«Esperemos que tras la Semana Santa llegue mejor tiempo y se consoliden en el primer puente de mayo las cifras turísticas que estamos acostumbrados. Todo indica a que este año va a ser un gran año turístico».
Inicio de la temporada alta con 1,7 millones de personas afiliadas en hostelería
El mes de marzo ha cerrado con un total de 1.740.512 personas afiliadas en la hostelería en España (dato medio no desestacionalizado), convirtiéndose en el mejor mes de marzo de toda la serie histórica, según los datos del Ministerio de Trabajo. En comparación con febrero, hay 83.946 afiliados más.
En marzo del pasado año, la afiliación en hostelería alcanzaba a 1.654.020 personas, un 5% menos. Si se compara el dato actual con el del mismo periodo de 2019, que es el último registro previo a la pandemia, la variación es aún mayor: actualmente las personas en situación de alta laboral en hostelería son un 11 % más que las 1.572.984 que había entonces.
Según la clasificación del código CNAE (Clasificación Nacional de Actividades Económicas) la amplia mayoría de estos afiliados corresponden a la categoría de servicios de comidas y bebidas. Concretamente, en este mes de marzo han sido un 80% del total, frente al 20% de personas afiliadas en la de servicios de alojamiento.
En cifras absolutas esto supone que, actualmente, haya 1.394.202 personas afiliadas en servicios de comidas y bebidas y 346.310 en servicios de alojamiento (datos medios no desestacionalizados), señalan desde el portal de empleo Infojobs. Estos datos, en comparación con marzo de 2023, han aumentado un 4% y un 9%, respectivamente.