La segunda edición de los premios Materia Prima, que organiza el restaurante Don Producto y Tú de Vitoria-Gasteiz y reconocen la gran labor de pequeños productores, premian este año a un txakolí muy especial, una sidra de hielo, unos lácteos ecológicos y los productos agrícolas de una cooperativa.

El restaurante Don Producto y Tú de Vitoria-Gasteiz acogía el pasado 27 de junio la entrega de estos galardones que buscan dar voz a todas aquellas personas que dinamizan la gastronomía y la alimentación local con sus creaciones, elaboraciones y otros trabajos artesanales del campo, el mar, la montaña y la granja.

En una decisión nada sencilla, dada la alta calidad de los productos finalistas, el jurado ha elegido a los cuatro ganadores de esta edición:

• Aromas del Sur – txakolí de la bodega Bat Gara (Amurrio, Álava)

Un vino que nace de la ilusión de dos viticultores de Bat Gara por rescatar la zona vitivinícola del Valle de Aiala, en el norte de Álava, y elaborar unos vinos atlánticos diferentes, porque tienen ‘un toque de sur’, como indica su nombre, pero toda la esencia de un vino del norte.
Los viñedos de los que se obtiene, de la variedad Hondarrabi, están en Lezama, a 340- 400 m de altitud, en unterreno es arcilloso- calcáreo con piedras de arena.
Tras su fermentación espontánea en barricas de cerezo donde se van añadiendo levaduras autóctonas, permanece durante 10 meses sobre lías:
El resultado es un vino de color amarillo con aromas a frutos secos, tostados y fruta madura, bien equilibrado. La entrada en boca es fresca, con una explosión de sabores que sorprende y un fondo cítrico que perdura.

• Productos agrícolas de la cooperativa Soilik (Abetxuko, Vitoria-Gasteiz, Álava)

Soilik es un proyecto cooperativo de agricultura regenerativa que fomenta la innovación y el intercambio de conocimientos para generar una red de personas capaces de producir “el alimento que merecemos lo más cerca posible”, explican sus socios,
Utilizan técnicas innovadoras para restaurar los agroecosistemas tratando de mitigar el cambio climático desde el sector primario, y comparten experiencias para multiplicar las capacidades productivas en un entorno colaborativo.
Sus excepcionales productos de la huerta (desde acelga roja a colinabos, pasando por berzas, berenjenas, habas tiernas, repollo, col china, lombarda, kale, pak choi o espinaca japonesa de gran calidad) se pueden encargar y recoger en su finca los miércoles, o en el Mercado de Santa Bárbara de la capital alavesa los jueves.

• Sidra de hielo Oiharte (Zerain, Gipuzkoa)

En la sidrería Oiharte, de la licalidad guipizcoana de Zerain, cuentan con una gran gama de productos con DOP Euskal Sagardoa derivados de la manzana autóctona, de diferentes variedades propias y de los caseríos del entorno, en una apuesta por la innovación y la diversificación.
Su trabajo es fruto del conocimiento heredado en varias generaciones sobre métodos tradicionales combinados con la tecnología más avanzada; y el resultado es toda una gama de sidras: desde la sidra natural en botella o en lata hasta la ecológica o la envejecida en madera, espumosa o con lúpulo, pasando por la ganadora de este certamen, la sidra de hielo.
Esta se consigue congelando dos veces el mosto procedente de la variedad de manzana Errezil para conseguir un fermentado sin agua. Cuando el mosto ha alcanzado los 9-10º, se filtra y se pasteuriza.
Se trata de una sidra de un color dorado brillante, dulce en boca, con un gran sabor a manzana asada que perdura durante mucho tiempo.

• Yogures de lácteos Bizkaigane (Errigoiti, Bizkaia)

Bizkaigane, en la pequeña localidad vizcaína de Errigoiti, comenzó en 1983 como el proyecto de tres jóvenes decididos a salvar la ausencia de relevo generacional en el sector ganadero, y es hoy es hoy una cooperativa compuesta por nueve personas.
Comenzaron con la venta de leche de vaca y después empezaron a elaborar derivados como quesos frescos y curados, hasta que incorporaron las ovejas y crearon su propio huerto y un invernadero para autoabastecimiento.
Su producción es ecológica desde 2005 y ahora hacen también yogur, queso de pasta fina, azul, crema de untar, kéfir y bebidas frescas a partir del suero sobrante de la leche mezclada con zumos, además de un queso de oveja latxa inscrito en la asociación Artzai Gazta de pastores de Euskal Herria, y rulos con la leche de este mismo animal durante sólo unos meses al año.
Sus productos, de muy alta calidad, se pueden encontrar en muchas tiendas de las localidades vizcaínas de Gernika y Mungia, así como en las ferias de ambas localidades y de Bakio cada semana.

El jurado que ha seleccionado a estos cuatro ganadores de los premios Materia Prima 2024 son los periodistas gastronómicos Josema Azpeitia, Julián Méndez, Aiztol Zugasti, Marta Renovales y Aitor Buendía, además de Ángel Fernández Retana (del Basque Culinary Center), José Antonio Merino (de Arabako Txakolina), Sonia Tapia (chef de El Frontón de Tolosa) y la sumiller Elisa Pintón.

Toda una jornada gastronómica

Dentro del evento de entrega de los II Premios Materia Prima se celebraron también debates, homenajes y firmas de libros gastronómicos, formando unas interesantes jornadas gastronómicas en toda regla.

Entre ellos, la mesa redonda moderada por Julián Méndez, sobre ‘Desmitificar el Km 0’ y con la participación de hosteleros, divulgadores gastronómicos y prensa especializada. ¿La conclusión? Que en la actualidad es casi imposible estar completamente comprometido con los ingredientes de proximidad porque siempre hay algo que no se pude cultivar en el mismo clima o territorio. Sin ir más lejos, ¿de dónde viene el gas con el que cocinamos? ¿o la canela que endulza postres tan tradicionales como el arroz con leche?  

Estar lejos no significa ser malo, aunque debería existir una preferencia por consumir el producto cercano y de temporada. En este punto destaca la importante labor de los restaurantes, con sus cartas de mercado

Estar lejos no significa ser malo, aunque los asistentes tenían claro que debería existir una preferencia por consumir el producto cercano y de temporada. En este punto destaca la labor de los restaurantes, con sus cartas de mercado, como el mejor reflejo para la sociedad, y la educación de los más pequeños como un pilar fundamental para la concienciación. Quizás no se pueda hacer con el 100% de los ingredientes de la despensa, pero siempre hay oportunidad de consumir alimentos de calidad cultivados y elaborados en los alrededores.

En la cena de entrega de premios, también se homenajeó al periodista José Peñín, una de las grandes personalidades del vino y la comunicación por su larga trayectoria en el sector. Peñín se mostró muy agradecido por el reconocimiento y también “impresionado” mirando a los últimos 50 años, que resume en un libro que en breve verá la luz, ‘La memoria del vino’, que recoge experiencias por todo el mundo y que será editado por Planeta Gastro,

No faltará la firma de libros gastronómicos: por un lado, el recién publicado ‘Parejas Perfectas’, del crítico Pepe Barrena y el chef de la Tasquita de Enfrente, Juanjo López, y por otro el reeditado ‘Recetas sencillas para novatos y cocinillas’, de Xabier Gutiérrez.