Catering Doña Col ha inaugurado un obrador de 400 m² en Madrid, desde donde ofrece sus servicios a toda la península en eventos de todo tipo y de cualquier tamaño.

Fundada en 2016 en Zaragoza, Catering Doña Col ha desembarcado en Madrid con una oficina y obrador de 400 m2, con el objetivo de expandir su negocio y ampliar su área de influencia a toda la península. Así, en junio ya servía un catering para 1.000 personas en la capital.

«Instalarnos en Madrid era el paso natural que teníamos que dar. Es un reto importante, hay más competencia, pero atesoramos ya una trayectoria de casi diez años», señala Marta Ribot, fundadora y CEO de la empresa. «Doña Col viene con muchas ganas de innovar y ofrecer soluciones prácticas y novedosas a nuestros clientes de Madrid: los existentes y los potenciales».

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Mobtaje del catering Box de Doña Col

La compañía de catering ofrece un servicio práctico, cuidadndo la calidad de los productos «y sin disparar el precio».

Los clientes puede elegir entre preparaciones clásicas de la gastronomía española o ideas más sofisticadas e innovadoras, y cuenta también con opciones vegetarianas, sin gluten o saludables.

Todos los productos son transportados en contenedores isotermo que preservan intacta la calidad de los platos hasta el momento exacto de su consumo. Se sirven exclusivamente en menaje desechable compostable.

Catering automontable

Durante la pandemia, Marta Ribot ideó Catering Box, un sistema de catering automontable, pionero y muy versátil, que permite servir de una forma sencilla el catering sin necesidad de asistencia extra ni montaje previo. Esto supuso la consolidación del negocio en Zaragoza, donde es una referencia en el sector.

Además del exitoso Catering Box, el catálogo de Doña Col contiene soluciones como las bolsas para picnic o los desayunos y boxes a domicilio totalmente personalizables con flores, tazas o peluches.

Por supuesto la empresa también lleva a cabo los montajes más tradicionales pata todo tipo de eventos: cócteles, coffee breaks y servicios con montaje, siempre ofreciendo una gran variedad de opciones gastronómicas. Además, cuenta incluso toda una línea de catering específica para eventos infantiles.

La máxima personalización del servicio es el secreto de Doña Col: cubre eventos de todo tipo, de carácter profesional o personal, y de cualquier tamaño.

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