El Ministerio de Interior ha pospuesto al 2 de diciembre la entrada en vigor del nuevo registro de viajeros recogido en el Real Decreto 933/2021 que estaba prevista para el 1 de octubre. Un alivio temporal para el sector turístico, mientras que los hoteleros reclaman una revisión profunda de la nueva normativa.

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La ampliación del aplazamiento, según el Ministerio, se debe a razones técnicas para facilitar la interconexión y la transmisión de datos de los establecimientos situados en comunidades con cuerpos de policías autonómicos.

Desde Interior se afirma que ha habido «una interlocución permanente» con los sectores afectados para facilitar la adaptación a la nueva normativa y a la plataforma donde se introducen los datos, y señala que la próxima reunión con los representantes turísticos será el 4 de octubre.

La normativa obliga a compartir los datos de cada reserva, entre los que se encuentran el número de referencia (identificación del contrato), la fecha de reserva, de entrada y de salida, el establecimiento (tipo, denominación y dirección), el número de viajeros y el tipo de pago. También el nombre y DNI de la persona que reserva y sus datos de contacto.

Para los hoteleros, es imposible automatizar este proceso, que va a suponer «un trabajo manual añadido y desproporcionado» para los establecimientos y un considerable aumento de errores, entros muchos problemas.

Un alivio (momentáneo) para el sector

Por ello, la decisión de Ministerio de aplazar la entrada en vigor del nuevo registro de viajeros supone un alivio para las compañías turísticas, que han mostrado durante meses su oposición frontal a la aprobación de esta normativa.

«Recibimos con satisfacción la ampliación del periodo transitorio para la entrada en vigor del RD/933, ya que es una demanda que desde todo el sector turístico en general y desde Ceav en particular se viene realizando insistentemente», señala vicepresidente ejecutivo de la Confederación Española de Agencias de Viaje (Ceav), José Manuel Lastra. «Desde Ceav vamos a seguir insistiendo en que se exima a las agencias de viajes de la aplicación de la norma».

Por su parte la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat) ha manifestado su ‘desacuerdo’ con respecto al aplazamiento, ya que afirma que «no se trata de una cuestión de tiempo de adaptación tecnológica, sino que es necesaria una revisión profunda del contenido del Real Decreto 933/2021, que implique un conocimiento de la forma en que se desarrolla la actividad turística y escuche a las partes involucradas».

«No se trata de una cuestión de tiempo de adaptación tecnológica, sino que es necesaria una revisión profunda del contenido del Real Decreto 933/2021, que implique un conocimiento de la forma en que se desarrolla la actividad turística y escuche a las partes involucradas»

La patronal hotelera española subraya que el rechazo al Real Decreto es generalizado y unánime a nivel nacional y europeo.

«Esta norma ha de ser revisada en profundidad, para que se tenga en cuenta la forma en que se desarrolla la actividad turística y, conociendo su operativa, se desarrollen propuestas viables que proporcionen seguridad jurídica tanto a los viajeros como a las empresas obligadas. Todo ello, con la garantía de que no suponga una pérdida de competitividad para España y una carga administrativa incomprensible e inadmisible para el sector”, subraya Jorge Marichal, presidente de Cehat.