La sostenibilidad y el desperdicio alimentario fueron los ejes del Congreso de Restauración Colectiva 2017, que se ha celebrado en Valencia como actual Capital Mundial de la Alimentación Sostenible. El evento reunió a 250 profesionales del sector, mostrando su fuerza como el gran foro anual de las colectividades.

Ponencia del Congreso de Restauración Colectiva 2017
El Congreso de Restauración Colectiva reunió en Valencia a 250 profesionales del sector

En esta ocasión el Congreso de Restauración Colectiva se ha realizado en Valencia por su compromiso con la iniciativa de la FAO en la lucha por conseguir una alimentación sostenible. Vicent Domingo, comisionado especial del programa Valencia, Capital Mundial de la Alimentación Sostenible 2017, fue el encargado de abrir el encuentro destacando el papel de la restauración colectiva y social como puntal básico y colaborador imprescindible para lograr la sostenibilidad alimentaria y evitar el desperdicio de comida.
Así, en el congreso se hizo un repaso a la normativa referente a la seguridad alimentaria, incidiendo especialmente en el nuevo Reglamento UE 2017/625,  que concede mayor importancia a la confianza del consumidor y la lucha contra el fraude alimentario a través de controles y actividades oficiales más eficaces y armonizados en la UE. La norma internacional ISO 22.000, la gestión de alérgenos e intolerancias, y la presentación de la Guía de aplicación del sistema de autocontrol en comedores escolares, promovida por Aercov (Asociación Empresarial de Restauración Colectiva de la Comunidad Valenciana) también fueron objeto de análisis.

Es posible ofrecer una alimentación saludable, variada y de aspecto y sabor atractivos en las escuelas y las residencias de la tercera edad; que los más pequeños aprendan a comer pescado fresco y verduras, o los mayores a saborear nuevas texturas más apetecibles

La alimentación saludable, variada y de aspecto y sabor atractivos fue otro capítulo de indiscutible interés en el congreso, donde quedó de manifiesto que es posible promover una alimentación de estas características en las escuelas y las residencias de la tercera edad; que los más pequeños aprendan a comer pescado fresco y verduras, o los mayores a saborear nuevas texturas más apetecibles.

Comunicación, la asignatura pendiente del sector

La comunicación en la restauración colectiva fue otro de los temas a debate y una cuestión que nunca se había abordado en un foro del sector. Se trata de un aspecto básico para crear marca y generar una identidad corporativa, no sólo a nivel particular de las empresas, sino de todo el conjunto del sector.
La conclusión general en el congreso fue clara: queda todo por hacer; es necesario hacer una puesta en valor del sector, de los profesionales, de su trabajo, y del importante papel que desempeña en la sociedad. «De lo contrario, la restauración colectiva seguirá siendo tratada injustamente como una restauración invisible y poco reconocida, anulada por la restauración comercial y la gastronomía de relumbrón», señalaron los ponentes. Y con el agravante de que cuando la restauración colectiva aparece en los medios, a menudo es con noticias negativas.

En materia de comunicación, que es clave, en la restauración colectiva queda todo por hacer. Si no se toman medidas, «la restauración colectiva seguirá siendo tratada injustamente como una restauración invisible y poco reconocida, anulada por la restauración comercial y la gastronomía de relumbrón»

Para revertir esta imagen y empezar a comunicar en positivo, el sector necesita trazar una estrategia de cohesión para remar en el mismo sentido. Y el Congreso de Restauración Colectiva ha facilitado los primeros pasos poniendo en contacto a diferentes actores del sector: empresas, proveedores, administraciones, responsables de cocinas y servicio, dietistas y nutricionistas, técnicos de calidad, estudiantes… fomentando la intercomunicación con el objetivo de dar al sector la visibilidad que se merece.

El alto coste del desperdicio alimentario

Otro de los temas clave del Congreso de Restauración Colectiva 2017 fue el de la sostenibilidad, y especialmente el desperdicio alimentario. Este último aspecto supone para las colectividades un coste económico, ambiental y social que las empresas responsables deben evitar, sensibilizando al personal implicado y ofreciendo estrategias logísticas y educativas para reducirlo. Se aportaron iniciativas para aplicar en todo tipo de empresas, como la de la eliminación del desperdicio alimentario en los aviones.
Las compras de proximidad, el proyecto europeo de compras verdes, y tendencias innovadoras como el nuevo restaurante de empresa, la restauración en grandes eventos deportivos o la aplicación del vending para recoger, reducir y reutilizar envases alimentarios, fueron otros temas que se abordaron.

El Congreso de Restauración Colectiva se consolida como el único evento a nivel nacional que reúne a los profesionales de la restauración social y colectiva, y que año tras año es un escaparate tanto de la problemática que afecta al sector y de las nuevas tendencias y soluciones

El Congreso de Restauración Colectiva se consolida así como el único evento a nivel nacional que reúne a los profesionales de la restauración social y colectiva, y que año tras año es un escaparate tanto de la problemática que afecta al sector y sus posibles soluciones, como de los avances y tendencias para seguir evolucionando.
Además de los habituales patrocinadores y colaboradores, en esta edición el evento ha contado con el patrocinio principal conjunto de las ferias Alimentaria y Hostelco, quienes siguen apostando fuertemente por el sector de las colectividades. De hecho, la próxima edición del congreso tendrá lugar en Barcelona en el marco de ambos certámenes, que se celebrarán conjuntamente del 16 al 19 de abril de 2018.