Paco Menéndez, director gerente de la firma Wifisafe, continúa con la segunda parte de su interesante y didáctico artículo sobre la correcta instalación del wifi en los hoteles. En esta ocasión se centra en vario elementos cruciales: el controlador de Aps y Vlans; el corazón de la red, el controlador, y la gestión correcta de todos los elementos y de lo que realmente queremos ofrecer a nuestros clientes. Porque además de elegir correctamente la tecnología, el hotelero ha de saber quién se conecta a su wifi,  cuándo y como, y por supuesto, guardar un log de conexiones.

Paco Méndez, director gerente de Wifisafe
Paco Méndez, director gerente de Wifisafe

A la hora de instalar el wifi en el hotel hay que  estimar también las necesidades de ancho de banda que precisaremos contratar con nuestro operador, ya sean Adsl, fibra óptica, 3g, LTE, satélite o lo que nuestro operador nos informe que tiene disponible en la zona para cubrir las  necesidades del hotel.
Seguramente deberemos poner más de una WAN. Y llegados a este caso deberemos tener en cuenta otro elemento esencial en nuestra red: un agregador WAN, que debe ser capaz de gestionar y procesar los miles de peticiones de todos los usuarios de nuestra red, elegir la wan más adecuada y por supuesto ha de ser capaz de avisar al instante de cualquier fallo en la red de forma inmediata, por ejemplo con un mail automático ante la caída de una de nuestras Adls o los microcortes habituales.
Además es conveniente que el agregador WAN sea capaz de crear VPN, o al menos de ser transparente a ellas, y de marcar reglas según las peticiones que tenga, ya sea de calidad de servicio como de enrutar adecuadamente aplicaciones y servicios tanto upload como download. Y es recomendable que sea capaz de capar servicios no deseados como P2P, ect.

El corazón de la red: el controlador

Una instalación bien hecha precisa de un estudio adecuado. No vale aquello de ir llenando el hotel de Aps (puntos de acceso a Internet) en cada esquina sin orden, de cualquier modo, mezclando marcas y productos con características diferentes, instalando repetidores domésticos, amplificadores, etc.: todo eso no va a lograr otra cosa que hacer una red no funcional, insegura y caótica.

No vale ir llenando el hotel de Aps (puntos de acceso a Internet) en cada esquina y de cualquier modo, mezclando marcas y productos con características diferentes, instalando repetidores domésticos, etc.: todo eso da lugar a una red no funcional, insegura y caótica

Un ejemplo: si hemos puesto 30 Aps por todo el hotel, debemos de ser capaces no sólo de saber dónde están y que servicio están dando, si no de saber si están realmente operativos. Y tememos, además, que ser capaces de gestionarlos. Esto es:
– Que cuando un AP se cuelgue, se pare, se bloquee, no necesitemos más que mirar nuestro correo e-mail o consultar al controlador para saber, con absoluta seguridad, que el 100% de nuestra red está funcionando adecuadamente.
– Que cuando un Ap tenga que ser reseteado, configurado,cambiarle la Ip, hacer un upgrade, gestionar la cantidad de usuarios simultáneos, subir o bajar potencia, ect.,  podamos hacerlo desde recepción tranquilamente o el departamento de informática de la empresa o externo a ella.
En definitiva: debemos ser capaces de gestionar y controlar la red. Que cuando un cliente se queje sepamos por qué y podamos solucionarlo de forma inmediata.
Para todas estas gestiones y más esta el «controller» o controlador. Pero ojo:  para disfrutar de las funcionalidades de esta pieza de monitorización todos los aps deben ser del mismo fabricante que el controlador; en caso contrario solo podríamos monitorear si está en marcha o caídos, y eso puede no ser suficiente.
Es muy importante ser capaces de actuar al momento. Imagínate que has alquilado un salón de conferencias de 200 personas y los aps que están dentro dejan de funcionar correctamente. Lo más probable es que la empresa que te alquila el salón se niegue a pagar la minuta del mismo porque para para su conferencia o reunión, la conexión era indispensable.
La cuenta de resultados y la imagen del hotel valen mucho más que un Ap doméstico de 50 o 100 euros. ¿Cuántos hoteles se la están jugando hoy en día con estos equipos?

La cuenta de resultados y la imagen del hotel valen mucho más que un Ap doméstico de 50 o 100 euros. ¿Cuántos hoteles se la están jugando hoy en día con estos equipos?

Y ahora, la gestión total

Ya tenemos todo lo anterior, muy bien; pero ¿está gestionado?
Para ofrecer un servicio wifi seguro y eficaz en el hotel se necesita una gestión de usuarios, establecer reglas. Ofrecer, en definitiva, imagen, seriedad y profesionalidad.
El «portal cautivo», es decir, el acceso a una página desde la cual se confirmara al cliente que está conectando a la red del hotel, será una página web personalizada con los datos del hotel, sus servicios, su imagen corporativa, su buzón de sugerencias, etc. Además, en ella pediremos o no el usuario y password, según queramos establecer el acceso, pero por supuesto el cliente deberá siempre aceptar las condiciones particulares del servicio, tanto propias como legales, y la descarga de responsabilidades.
De este modo, con este «portal cautivo» gestionaremos los clientes, la calidad del servicio que queramos ofrecer a cada tipo de cliente, y podremos personalizar sus necesidades.
Gestionaremos a nuestros clientes de forma personalizada y profesional, teniendo muy claros datos como:
¿Quién se conecta? ¿Establecemos una conexión por habitación o para todos los huéspedes? ¿con todos los dispositivos a la vez? Porque hay clientes que viajan con el portátil, tablet y móvil y aunque no hagan uso de los tres a la vez, los dejarán cargando y en marcha conectados a la red wifi aunque estén en la piscina o descansando.
¿Cuándo se conecta? ¿Desde que se aloja hasta que se va, o por franjas horarias? O establecemos si es una conexión de cortesía porque es un cliente externo al hotel que está consumiendo en la cafetería y le damos solo 20 minutos tiempo…
¿Que ancho de banda ofrecemos?¿200, 300, 500Kbits, ó 1, 2, 4, 5, 10 megas? ¿Y a todos los clientes, a unos más y a otros menos, dependiendo si es gratis o de pago, o si es un cliente Vip?  ¿O si acude al de salón de reuniones? ¿O diferenciamos con el que simplemente está tomando un cortado?

Hemos de plantearnos muy bien que el servicio que daremos, pues no podemos pensar que en todos los casos y hoteles vamos a ser capaces de ofrecer una red wifi multimedia si nuestras conexiones al operador son limitadas

¿Cuánto puede descargarse? ¿100, 200, 500 megas a día? ¿A la hora? Eso también dependerá de la conexión Wan (adls) que tengamos. Debemos de ser capaces de administrar los servicios que ofrecemos dependiendo del caudal que tengamos en cada momento, y decidir si van a poder descargarse una película de video, o usar Skype, Spotify, Youtube, ect. En definitiva; hemos de plantearnos que el servicio que daremos, pues no podemos pensar que en todos los casos y hoteles vamos a ser capaces de ofrecer una red wifi multimedia si nuestras conexiones al operador son limitadas.
Y algo fundamental, hay que  guardar un log de conexiones, pues desde nuestra red, de nuestra IP, alguien podría cometer algún delito, divulgar falsos datos, reventar cuentas, realiza un acceso no autorizado… Así, si las fuerzas de seguridad nos piden saber quiénes se conectaron el 3 de marzo del 2013 será tan fácil como ver el historial de ese día y facilitárselo impreso, o en un archivo. La seguridad, ante todo.
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