Conscientes del enorme potencial del turismo gastronómico, tres jóvenes emprendedores han creado Foodie&Tours, una plataforma que comercializa a nivel internacional y en tiempo real, diferentes actividades enológicas y gourmet locales. Inicialmente ofrece 200 productos en 25 destinos europeos.
La web www.foodieandtours.com propone sus experiencias de alta gama clasificadas en diferentes categorías: Catas de vino; Clases de cocina; Paseos gastronómicos, Tours culinarios y Comida en casa de. Ofrece una compra fácil y segura con un único intermediario, tanto a clientes individuales, como a grupos y empresas.
Se crea así un inventario global que integra las ofertas de colaboradores seleccionados en todo el mundo, y el viajero foodie ahorra tiempo en interminables búsquedas, encontrando la mejor oferta de cada destino en pocos minutos.
Para ello, los agentes de Foodie&Tours seleccionan a sus proveedores bajo estrictos requisitos de calidad, e incorporan sus productos a su extenso catálogo bajo una comisión por reserva generada. A cambio, ofrecen potentes soportes, como la web o su novedoso ‘Concierge Foodie’, una integración tecnológica destinada a los hoteles de alta categoría, que facilita y agiliza la prescripción de este tipo de actividades por parte del personal de recepción.
Los agentes de Foodie&Tours seleccionan a sus proveedores bajo estrictos requisitos de calidad, e incorporan sus productos a su extenso catálogo bajo una comisión por reserva generada
De esta forma, Foodie&Tours se convierte en un partner para todas las empresas subsidiarias del turismo, ya que permite el acceso a clientes objetivo en el propio lugar de destino, y lo hace a través de un único canal de venta. Esto asegura la calidad de la oferta, y un absoluto control de la prescripción y de las comisiones. En palabras de su CEO, Hugo Palomar, “queremos consolidar los destinos en los que ya estamos operando, ampliar el catálogo de experiencias y, en definitiva, convertirnos en el referente de las agencias de turismo para generar más y mejor oferta en cada destino a través de la gastronomía».
Tres emprendedores
De capital 100% español, Foodie&Tours está fundada por Hugo Palomar, Juan Peist y Enric Elvira, tres jóvenes emprendedores con amplios conocimientos en innovación turística y tecnología online, además de gastrónomos. Palomar, su CEO y máximo accionista, fue también uno de los fundadores de Byhours.com, además de crítico en la Guía Repsol 2007: “Nuestra idea es promover la cultura y el conocimiento de un destino a través de la gastronomía, porque es la mejor carta de presentación para conocer su tierra, historia, valores, personas y tradiciones. Así, Foodie&Tours quiere ser el vehículo para traer clientes a todos los destinos gastronómicos, ayudando a los emergentes a generar oferta, y a los maduros a ampliar la existente”, explica. Completan el equipo directivo la sommelier Mireia Pascual y la responsable de marketing Tendelle Sheu.
Conocer mundo a través de sus sabores
Los usuarios de la web podrán contratar experiencias como descubrir los magníficos vinos de la Provenza elaborados en la margen izquierda del Ródano; conocer Estambul a través del paladar local y su mercado de especias; explorar la tradición cervecera de Milán, o aprender a cocinar paella en Valencia, salmorejo en Sevilla o la mejor especialidad de un chef Michelin en su propia cocina.
La web ofrece a los hoteles de alta gama el novedoso ‘Concierge Foodie’, una integración tecnológica que facilita y agiliza la prescripción de este tipo de actividades por parte del personal de recepción
Se trata, por tanto, de conocer el mundo a través de sus sabores, una opción por la que se decanta un número cada vez mayor de viajeros. “El turista es cada vez más activo y busca formas distintas de descubrir, de conocer, de aprender, y la gastronomía se ha convertido en una de las más atractivas”, afirma Hugo Palomar.
El potencial del turismo gastronómico
Según las cifras de la World Food Travel Association, la gastronomía es una industria global que genera alrededor de 150.000 millones de dólares, con un crecimiento del 10% anual, y que mueve a un importante número de viajeros a disfrutar de alguna actividad específica relacionada con la comida o el vino, invirtiendo una media de 320 euros por persona. El turista foodie tiene el siguiente perfil: entre 30-60 años; nivel adquisitivo medio-alto; procedente sobre todo de grandes ciudades de Reino Unido, Estados Unidos, Australia, Canadá, y sensibilizado por conocer la cultura y la historia del mundo a través de sus cocinas y sabores.