Chefs que se mueven: Sergi Arola vuelve a Madrid tras dos años de ausencia asesorando a V Club Feat, en la sala V de Vegas; Luis Arévalo inicia una nueva etapa en Gaman, en Madrid, donde se puede disfrutar de su mejor cocina nikkei, y el maestro pastelero Oriol Balaguer se pasa al mundo salado junto a su mujer, Marta Rams, en Quatre Coses, un restaurante informal y de picoteo en Barcelona.

El regreso de Sergi Arola a la capital

Tras la apertura del restaurante Cormorán en Santander, Sergi Arola vuelve a Madrid dos años después con la idea de recuperar el espíritu del ‘97, cuando abrió el primer La Broche para dar de comer de forma divertida e informal.

Y lo hace como asesor de V Club Feat (Caunedo, 4), el pequeño restaurante ubicado dentro de la sala y club de juego V de Vegas. Toda una experiencia para el paladar y un espectáculo para la vista, el oído y el tacto. Un refugio dentro de un espacio ‘only adults’, único y exclusivo en Madrid, en una de las salas de fiestas del momento, con espectáculos en vivo y una imponente decoración.
En la oferta del restaurante no faltan creaciones emblemáticas de Arola como sus famosas patatas bravas, la bomba Barceloneta, el bocata de calamares con pan de tinta o las alitas fritas con salsa kimchi , junto a recetas inéditas de una cocina prêt à porter tanto en carta como en varios menús ideales para picar y sugerencias para todo tipo de comensales, desde los más sibaritas a los más modernos: Chateaubriand ‘V de Vegas’, el entrecot de vacuno o el steak tartar, hasta las mini burgers de vacuno, foie, queso y jugo reducido.
Todos ellos se pueden acompañar con alguno de los originales cócteles de la  barra de V de Vegas, que van en sintonía con la cocina de Sergi. Y como colofón, disfrutar de los espectáculos de la casa en las noches de los jueves, viernes y sábados. La cocina de Arola está disponible de martes a sábado para cenas hasta la 01:30 horas, por un precio aproximado de 45 €. Así mismo, hasta las 03:00 h. se podrá disfrutar de una carta más corta para picar.
 

Gaman, el nuevo proyecto de Luis Arévalo

El cocinero peruano asentado en Madrid ha cerrado su proyecto personal, Kena, para iniciar una nueva andadura, Gaman, término que en la filosofía japonesa significa autocontrol, perseverancia, fortaleza… y que definen muy especialmente la nueva etapa del chef.

Situado en la madrileña plaza de San Amaro, 8, en una sala íntima y acogedora, en Gaman se puede disfrutar de la mejor cocina nikkei de Arévalo, pausada y sin prisas. Un lugar donde el chef puede hacer “lo que quiero realmente, simplificar, disfrutar de y con mi trabajo», afirma. «El objetivo aquí es dar bien de comer y de beber”.
La sala, con espacio para 30 personas, tiene una zona de mesas bien distribuida y una barra para 8 personas en la que el chef cocina y comenta todos y cada uno de los platos. La carta, equilibrada y muy completa, reúne todas especialidades de Luis Arévalo, con una excepcional materia prima.
Además, hay la posibilidad de degustar un menú “Omakase” por 69 €, con una selección de platos y bocados, con aliños y salsas donde se combina frescor, acidez, color y sabor. La bodega con una buena representación de vinos de pequeños productores, y por supuesto  los imprescindibles sakes.
 

Quatre Coses, la aventura salada de Oriol Balaguer

El maestro pastelero Oriol Balaguer se pasa al mundo salado con Quatre Coses, un concepto de restauración informal y de picoteo, con cocina abierta todo el día, ubicado en el centro de Barcelona (Consell de Cent, 329.). Lo hace junto a su mujer, la chef Marta Rams. La pareja trabajó juntas hace más 20 años en el barcelonés Talaia Mar, dirigido por Carles Abellán bajo la dirección de Ferran Adrià.

El nuevo local, que se define como «tapas restaurant«, ofrece «una carta viva de raciones, tapas y platos de cuchara«, que incluye desayunos, aperitivos y ensaladas, acompañados por las imprescindibles creaciones dulces de Balaguer, como sus emblemáticos hojaldres y también panadería. El precio medio oscila entre 20 y 35 euros.
Con 40 plazas en barra y comedor, Quatre Coses se centra su carta en el producto de temporada, en un espacio de aire industrial. Abre de forma ininterrumpida desde las 8 de la mañana hasta la media noche, y como su nombre indica, está pensado para ir a picar «cuatro cosas».
Rams y Balaguer (reconocido como uno de los mejores pasteleros de España), han trabajado en los últimos años en la construcción de la marca «dulce» Oriol Balaguer (con formatos como Boutique OB, Obrador y Classic Line, en Barcelona, y Boutique Oriol Balaguer y La Duquesita, en Madrid), y ahora se inician en el mundo salado. «Tenía pendiente adentrarme en el terreno salado», afirma Balaguer. «Mis inicios en la gastronomía fueron con Marta y estamos muy ilusionados de este nuevo proyecto que de una manera significa volver a nuestros orígenes».